Las Grutas es un poblado muy simpático y de playas extensas con aguas mas cálidas que en la costa de la Provincia de Buenos Aires. Es un destino con precios muy razonables, pero esa razonabilidad no oculta nuestra crisis, la gente va a la playa con sus propios pertrechos y con las famosas heladeritas portátiles. Se ve gente de clase media y clase media alta, todos tienen la misma filosofía, cuidar el mango. Desde las grutas vivimos el conflicto de los pilotos, nuestra opinión.
La conectividad es un problema que tiene mucho que ver con el turismo. La Argentina, que es extensa, exige recorrer muchos kilómetros para visitar sus atracciones que son muy variadas y para todos los sabores. Pero precisamente la mala conectividad es un pasivo no resuelto. Por ejemplo podría haber un servicio "low Cost" de helicópteros que mejore la conectividad entre Puerto Madryn y Punta Tombo. Se podrían generar circuitos turísticos muy atractivos. Es solo una idea aplicable a casi todos los destinos turísticos argentinos.
En ocasiones no es necesario hacer exhaustivos análisis para conocer la efectividad de las acciones de promoción turística llevadas a cabo por una institución, porque ellas comienzan a manifestarse en la integración y coordinación que dichas acciones exhiben en la propia organización adoptada para la conducción de las mismas.
Es obvio que ningún ser humano puede desprenderse de sus subjetividades, es imposible ser objetivo ya que ello significaría carecer de sensibilidad. Más de una vez nos formamos ideas sobre las cosas en base a los que nos dicen y cuentan, fotografías y ahora internet que nos genera realidades que sólo son virtuales. Por eso muchas veces idealizamos, en este caso sobre destinos turísticos, y luego la realidad "real" nos desilusiona, porque las cosas no son como las imaginamos. Esto nos pasó con Puerto Madryn.
Resulta siempre complicado hablar de la temporada de verano al inicio de la misma, porque una mera imagen o una declaración de prensa pueden producir comentarios favorables o negativos, sin que nos detengamos a analizar si el mensaje se ajusta al menos levemente a la realidad. Por eso, creo apropiado reflexionar juntos sobre lo que ha venido ocurriendo en los últimos años, incluyendo el actual período estival ya que no son tiempos aislados e independientes, por el contrario están fuertemente ligados entre sí, forman parte de ciclos y deben ser evaluados en su conjunto. Y cómo en todas las áreas de actividad, existen los axiomas, muchos de ellos trascienden el pasado reciente y por ende, son una constante que define la actividad turística en su propuesta de Sol y Playa.
Estamos a pocos días del comienzo de la temporada de "Sol y Playa", la principal propuesta turística de nuestro país, dónde toda la costa uruguaya recibe el mayor número de visitantes del exterior en un período, lamentablemente demasiado breve. Claramente, la inmensa mayoría son turistas regionales, pero desde siempre y por siempre los argentinos son la inmensa mayoría. Han sido, son y serán siempre factor determinante en el éxito o fracaso de nuestra propuesta estival. De allí la preocupación por la brecha cambiaria con nuestros vecinos. Es fundamental entonces cuidar cada detalle, brindar nuestra mejor imagen, que sepan que entendemos el esfuerzo que estarán haciendo quienes lleguen igual, que valoramos su fidelidad con el "paisito". Por lo antes expresado, es inexplicable que estemos a punto de cometer un error garrafal que puede generar un caos imposible de cuantificar.
Soy socialista por convicción, siempre soñé con un futuro mejor para nuestra especie, para mi país, para mis hijos y nietos. Por eso, soy frenteamplista desde su génesis, por eso participé desde entonces, aportando todo lo que pude en el desarrollo y crecimiento de ésta fuerza política, porque la concebí cómo la herramienta lógica, idónea para que los sueños, los míos, los de los míos, los de todos los uruguayos sin distinción se hicieran tangibles y también por eso formé parte del primer Gabinete de un Gobierno Progresista en la historia de nuestro país, en los albores del siglo 21. Tiempos de cambios, tiempos de mayor igualdad, tiempos de los postergados, tiempos de atender a las minorías, a los diferentes eternamente excluidos.
La mayoría de las veces cuando pensamos en la conectividad sólo nos referimos a la aérea, pero para explorar cientos de destinos, no sólo de la Argentina, sino de otros países de la región (Chile podría ser una excepción) que ofrecen variadas alternativas para poder hacer culto al verdadero sentido del ocio, nos encontramos con dificultades para el transporte que impactan negativamente no sólo en su desarrollo sino en la posibilidad de generar nuevas alternativas laborales.
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