En total, el transporte y el turismo ha sido responsable del 6,7 por ciento de las emisiones, por debajo del 7,8 de 2019.
Esto, en términos de emisiones es menos un 12 por ciento y un 8,4 por ciento menos en comparación con el PIB generado.
Julia Simpson, la presidenta del Consejo, dice que “estamos consiguiendo que el turismo y el transporte crezcan desacompasado de las emisiones, o sea que mientras el PIB aportado sube, las emisiones bajan. Este es un momento clave que demuestra que la sustentabilidad y la innovación en turismo van de la mano y pueden permitir un crecimiento futuro. Hemos de intensificar el trabajo de nuestras empresas para conseguir los objetivos de París”.
La dependencia del turismo y transporte en los combustibles fósiles cayó del 90 al 88,2 por ciento, mientras que las energías limpias pasaron del 5,1 al 5,9.
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