Según la compañía, esta demanda está impulsada por varios factores:
1 - Cambios en las tendencias de viaje: El turismo internacional sigue creciendo, con una previsión de hasta 70 millones de llegadas adicionales en 2025, lo que representa un aumento del 5% respecto al año anterior. Este incremento no solo implica más oportunidades de negocio para los hoteles, sino también la necesidad de una estrategia de revenue management más ágil y flexible. La diversificación de mercados emisores y la evolución de las preferencias de los viajeros exigen una mayor capacidad de adaptación en precios y distribución.
2 - Mayor influencia de los eventos: Los eventos se han convertido en un motor clave del turismo. En 2024, un 65% más de viajeros estuvieron dispuestos a desplazarse para asistir a conciertos, festivales, ferias y congresos en comparación con el año anterior. Este fenómeno obliga a los hoteleros a ajustar continuamente sus estrategias de pricing y disponibilidad para capitalizar la demanda en fechas específicas. Sin herramientas avanzadas, es difícil prever los picos de ocupación y maximizar los ingresos durante estos periodos.
3 - Aumento de la competencia:El crecimiento de la oferta hotelera es un reto significativo. Actualmente, hay 113.000 habitaciones en construcción en Europa y 142.000 en Estados Unidos, mientras que en España se espera la apertura de 260 nuevos hoteles entre abril de 2024 y diciembre de 2025. Este aumento de la competencia presiona a los establecimientos ya existentes para optimizar su estrategia de precios y distribución con el fin de mantener su cuota de mercado. En un escenario donde la diferenciación es clave, los hoteles deben apoyarse en soluciones tecnológicas que les permitan ajustar su oferta en tiempo real.
4 - Ineficiencias operativas: Muchos hoteles siguen dependiendo de métodos tradicionales como hojas de cálculo y ajustes manuales para gestionar sus precios y disponibilidad. Este enfoque no solo es propenso a errores, sino que también limita la capacidad de reacción ante cambios en la demanda. Además, el uso de herramientas fragmentadas dificulta la integración de datos y la toma de decisiones estratégicas basadas en información en tiempo real.
5 - Déficit de talento: La falta de profesionales especializados en la gestión de ingresos es otro desafío para la industria. A medida que el revenue management se vuelve más complejo, la demanda de expertos en este ámbito supera la oferta disponible. Esta escasez de talento obliga a los hoteles a buscar soluciones tecnológicas que simplifiquen los procesos y permitan optimizar los ingresos sin depender exclusivamente de la experiencia de un equipo especializado.
“Hoy en día, gestionar los ingresos de un hotel no es tarea fácil. Con los cambios en las tendencias de viajes, la creciente influencia de los eventos y el aumento de la competencia, la complejidad puede resultar abrumadora para los hoteleros. A menudo, esto da lugar a que se arraiguen prácticas obsoletas en las empresas de alojamiento, agravadas por la escasez de profesionales dedicados a la gestión de ingresos en todo el sector”, señala Leah Rankin, Chief Product Officer de SiteMinder.
Ante estos desafíos, los hoteleros necesitan herramientas que les permitan optimizar su rentabilidad de manera eficiente y accesible. La digitalización y la automatización juegan un papel clave en este proceso, ayudando a los establecimientos a adaptarse a un mercado cada vez más dinámico y competitivo.
Portal de América - Fuente: Tecno Hotel News