La Subdirección General de Gestión Económica y Patrimonial, dependiente de Interior, asigna a la aerolínea el traslado de migrantes a los que les consta una orden de expulsión del país. No obstante, también realizará vuelos dentro del territorio nacional para desplazar a “aquellos ciudadanos extranjeros que se encuentran bajo la custodia de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y deben ser alojados en Centros de Internamiento, o que estando ya ingresados en dichos centros deben ser trasladados a otros”, según la memoria justificativa del contrato. Por lo tanto, Air Nostrum también se encargará de trasladar a la península a migrantes arribados a las costas canarias por ruta marítima.
No obstante, el objeto principal de la contratación son los vuelos que transporten a “ciudadanos extranjeros que se encuentren bajo la custodia de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado sobre los que pesa una orden de expulsión forzosa del territorio nacional, que en ejecución de la misma deben ser trasladados a sus países de origen”. Estos migrantes suelen permanecer en Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE) a la espera de que se tramiten sus procedimientos de expulsión.
La adjudicación de este contrato se realizó a través de un procedimiento de licitación pública abierto y de tramitación ordinaria ante el que se presentaron dos ofertas. Finalmente, Interior ha concedido el servicio a Air Nostrum por ofrecer las mejores condiciones.
Interior alega motivos de seguridad para no facilitar más información sobre estos vuelos. De hecho, el departamento dirigido por Grande-Marlaska subraya el compromiso de “confidencialidad” que debe firmar la aerolínea adjudicataria, en este caso Air Nostrum. El contrato incluye á una cláusula específica que obligará a la filial de Iberia a formar a toda la tripulación y al resto de personal involucrado para que guarde “la adecuada reserva y confidencialidad” en lo relativo a “fechas, horas, aeropuertos, número de personas que se transportan, equipaje y en general, cualquier dato que pueda ser relevante” sobre los operativos.
La ruta canaria vuelve a ser la más mortífera: 4.808 personas migrantes han muerto en los cinco primeros meses del año.
Datos de migrantes expulsados
Según los datos del Ministerio del Interior, un total de 2.760 extranjeros fueron expulsados de España en 2023 por procedimientos iniciados por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en cumplimiento de la Ley de Extranjería, donde también se incluyen los casos de devoluciones a los países de origen. Esta cifra supone un descenso de casi el 25% respecto a los años precedentes: en 2022 fueron expulsados 3.642 extranjeros y en 2021 otros 3.594.
Las cifras de estos últimos tres años están muy alejadas de las que se registraban antes de la pandemia: 11.153 personas expulsadas o devueltas en 2019 y 11.384 en 2018. Lo que refleja que, después de que los vuelos quedaran en suspenso en 2020 por el coronavirus, el ritmo de las repatriaciones sigue estando muy por debajo del registrado en los años previos.
Portal de América - Fuente: Infobae