por Manuel Sierra
Estados Unidos de América, el país de la fantasía y el confort, no deja de sorprendernos cada día.
La delicada situación económica por la que atraviesa le impide reinventarse, y hacer como si nada pasara, es la mejor opción para que no se pierda el estilo de vida americano.
Después de todo la crisis continúa y muchos sectores de la economía norteamericana están sufriendo un duro revés, entre ellos el sector turístico, que a pesar de ser uno de los sectores productivos más importantes del gran país del Norte no puede escapar a la realidad y lo alcanza las generales de la ley.
Los recortes presupuestarios realizados por la administración del presidente Barack Obama han sido tan drásticos que le impiden ver que algunos de ellos afectan seriamente a la actividad turística, y a pesar de ello, nada va a cambiar en el corto plazo.
Argentina, como tantos otros países de Latinoamérica, ha visto reducido el número de Cónsules y vicecónsules que otorgan la visa, produciendo de esta manera una interminable demora en la entrevista para solicitar dicha documentación, que en algún momento ha alcanzado los 90 días de espera.
Difícilmente el pasajero argentino programe sus vacaciones con cuatro o cinco meses de anticipación, tiempo mínimo indispensable, según las nuevas disposiciones de la Embajada norteamericana, para tramitar la visa de turista, con lo cual existe una restricción encubierta a que los argentinos puedan visitar el gran país del norte.
En los primeros siete meses del año 2010 viajaron a Estados Unidos 258.528 argentinos, un 21.1% más que en 2009, y la proyección sigue en alza; las compañías aéreas han incrementado sus frecuencias y los operadores turísticos han intensificado la promoción del destino buscando generar más y mejores negocios con el destino.
Según Gary Sain, chairman del Orlando Convention & Visitors Bureau, cada 86 pasajeros que entran en La Florida se genera un puesto de trabajo, si lo multiplicamos por la cantidad de latinoamericanos que ingresan a todo Estados Unidos anualmente, veremos la importancia de reponer los cónsules faltantes.
De no revertirse la situación rápidamente, la demora y el alto costo para obtener una visa van a provocar que los pasajeros sean incentivados a visitar otros destinos más amigables.
fuente: mensajeroweb/foto: mastaekwondo.com