CONTIENE VIDEO #ZoomadasXelPDA

Nunca es tarde si tenemos claro el objetivo. Tal vez todo lo que se diga aquí sea considerado tardío si lo pensamos en función de la próxima temporada alta. Tal vez sea tomado como reflexiones válidas  y muy atendibles si decimos que lo presentamos pensando en el inicio de una nueva etapa a partir de 2022. Pero estamos seguros que también habrá quienes descarten este análisis porque descreyeron, descreen y descreerán acerca de la clase política y del empresariado del turismo uruguayo. No obstante ello, con este equipo de profesionales en la comunicación, en turismo y transporte, una vez más estamos dispuestos a tomar al toro por las guampas.

Introspección inicial

Hemos venido postergando desde hace muchos años "Pensar el turismo" en todos los ámbitos de la actividad. Hemos caído una y otra vez en reiterados errores todos los actores del total de sectores del turismo uruguayo, incluidos nosotros mismos. Algunos por desconocimiento (muchos), otros por intereses políticos y/o económicos y otros, como en nuestro caso, por exceso de frontalidad, que al chocar con otros pensamientos conservadores o escasos de empirismo han generado divisiones que contribuyeron a la inmovilidad, a la discontinuidad del desarrollo elemental y necesario de una propuesta como destino turístico. Hay prácticamente unanimidad en el desconcierto a la hora de ver el futuro. Afortunadamente, la nueva etapa que se encara con la conducción en el MINTUR de Tabaré Viera ha producido en los diferentes ámbitos expectativa y esperanza. Es por ello que reconfortados con la nueva coyuntura, nos pusimos a analizar en reuniones de producción del Portal de América con nuestro equipo y hemos decidido comenzar a transitar el tan postergado hábito del debate en la búsqueda de consensos. Con esa ruta trazada es que comenzamos en esta Zoomada X el PDA a transitar el camino del análisis "Hacia una gobernanza posible e impostergable del turismo uruguayo".

El marco ideal

El gobierno de turno debe proveer infraestructura y el marco adecuado para que los privados puedan emprender, desarrollarse y hacer negocios. Para llegar a ese estado es necesario sentarse a una mesa en conjunto para debatir, articular y coordinar reglamentos de frontera; conectividad aérea, fluvial y terrestre, cuales productos turísticos vamos a proponer en base al inventario de recursos que hay en el país y una vez bosquejada esa etapa ponerse a estructurarlos apuntando a la excelencia, pensando obviamente en las diversas áreas territoriales. Definir la regionalización y trabajar en base a ese mapa consensuado eliminando de una buena vez que "cada maestrito tenga su librito". Una vez obtenido el menú completo ordenarlo en una propuesta formal, prolija, con servicios de calidad pensados para los diferentes tipos de mercados a los que decidamos llegar.

Es muy importante saber cuáles son los eventuales mercados. No alcanza con pensar en "argentinos" por un lado, "brasileños" por el otro, regionales y extrarregionales. La "carta" que debemos presentar a quienes quieran llegar a nuestro territorio debe abarcar los diferentes segmentos socioecónomicos, etarios, temáticos y alternativos. Debemos estudiar profesionalmente y con el asesoramiento técnico idóneo el grado de competitividad de cada uno de esos segmentos, preferentemente de aquellos que compitan nítidamente con otros destinos cercanos y obrar en consecuencia.

¡Hay que anunciar medidas de exención!

Se escuchan cada vez más alto las voces con ese reclamo. Estamos acostumbrados a "rebajar el IVA", exonerar peajes, tratar de incidir en el costo de los combustibles y otras exenciones como método de atraer turismo y lo hacemos "al barrer", ¿eso es correcto?, ¿hemos agotado el debate al respecto?. ¿No habría que pensar quizás en una política de transporte especialmente pensada para alentar el turismo receptivo?; ¿No habrá llegado la hora de subsidiar operaciones temporarias de vuelos chárteres? ¿No deberíamos consensuar con los empresarios de los sectores el transporte fluvial y terrestre regional y buscar la forma de incentivarlos?

La comunicación y la comercialización

Una vez definidas estas etapas fundamentales, necesarias, imprecindibles, no resueltas profesionalmente hasta ahora sino que sobreviven con el nefasto efecto de "es lo que hay" o "es lo que siempre se ha hecho". Hay que diagramar la forma de comunicarlas, de promoverlas y de comercializarlas. La buena noticia es que en algún momento se ha avanzado en ello. La mala noticia es que no ha dado resultados. Por lo tanto hay que "barajar y dar de nuevo".

Aquí en este punto es donde el Estado debe proveer los recursos para generar la infraestructura tecnológica y el apoyo promocional que se consensúe.

¿Sólos o acompañados?

Hay dos bibliotecas muy diferenciadas. Con mucha razón y empirismo, hay analistas y operadores que sostienen que debemos salir al mundo a promocionarnos como un destino turístico único. Del mismo modo hay quienes afirman que debemos integrarnos al bloque regional y salir a captar mercados como multidestino.

Esta es otra de las discusiones pendientes, hay ejemplos contundentes de fracasos con las dos modalidades y muy relativos y esporádicos ejemplos exitosos.

La gobernanza imprescindible

La definición contundente de la palabra "gobernanza" es "Forma de gobierno basada en la interrelación equilibrada del Estado, la sociedad civil y el mercado para lograr un desarrollo económico, social e institucional estable."

El Estado - "Comunidad social con una organización política común y un territorio y órganos de gobierno propios que es soberana e independiente políticamente de otras comunidades".

La sociedad civil - La sociedad civil se concibe como el espacio de vida social organizada que es voluntariamente autogenerada, independiente, autónoma del Estado y limitada por un orden legal o juego de reglas compartidas. Involucra a ciudadanos actuando colectivamente en una esfera pública para expresar sus intereses, pasiones e ideas, y para intercambiar información alcanzando objetivos comunes.

El mercado - Lugar teórico donde se encuentra la oferta y la demanda de productos y servicios y se determinan los precios.

La coyuntura - Nos encuentra con un organismo rector de la actividad turística (MINTUR) en período de recomposición luego de un año y medio de conducción que afectada por la pandemia y por carencias propias que culminaron en la sustitución del ministro, no llegó a poner en marcha el tan esperado desarrollo del sector. Por otro lado, no hay certezas ni rumbo claro desde el Ministerio de Transporte, situación que obliga a confusiones varias y que torna incierta la política en este sector. La sociedad civil en el caso específico que nos ocupa tiene su representación genuina en la Cámara de Turismo, la cual tiene asumido por parte de su dirigencia (aunque sin resultados visibles) la necesidad de la incorporación de otros actores de la actividad económica que por la transversalidad del turismo deberían formar parte de la misma, y a la vez tiene definiciones muy claras y certeras a nuestro entender, acerca de lo que precisa la actividad para desarrollarse, las cuales están en consonancia con muy buena parte de lo anteriormente expresado.

Creemos que están dadas las mejores condiciones para encaminar todo.

Abrimos entonces el análisis.

Portal de América