Es bueno precisar que esta posición fue expresada con la participación del directorio en pleno de la aerolínea en formación, incluidos los dos directores miembros de ACIPLA, el gremio que nuclea a los pilotos.

En el citado pronunciamiento se recuerda que las organizaciones de los trabajadores que han llevado adelante las negociaciones con el Ejecutivo, lo han hecho en todo momento manteniendo el diálogo abierto y efectuando sus propuestas, habiendo sido  siempre escuchados por las autoridades quienes les dieron lugar a las mismas.

Del mismo modo se aclara que a nivel de esas organizaciones sindicales, en ningún momento se planteó la realización de juicios o demandas contra el Estado, no haciéndose responsables entonces, de actos individuales.

La razón y la oportunidad

Hemos podido saber que si bien las dos organizaciones sindicales de ex trabajadores de Pluna (OFP el sindicato de trabajadores y ACIPLA, el de pilotos) han trabajado juntos en el proyecto Alas U desde que el presidente Mujica aceptó como válida la propuesta de crear una nueva aerolínea, por la propia conformación de ambas organizaciones, han llevado adelante sus acciones de modo bastante diferente.

ACIPLA es un gremio que ha mantenido a lo largo de los años una estructura muy fuerte (a pesar de las lógicas desavenencias ocasionales o puntuales de toda corporación) y en todo momento, basados en esa coherencia, han ido conformando una institución que tiene como principio velar por los intereses de sus miembros y para ello, generalmente toma decisiones que quizás a otros conglomerados les resulte imposible. No todos los gremios tienen disponibilidad como para avalar por ejemplo el proceso de certificiación de ALAS U ante DINACIA como lo hizo ACIPLA, presentando una letra de cambio por una cifra en dólares bastante elevada. Tampoco todos los gremios ponen a disposición de sus miembros la asesoría legal necesaria cuando la misma es necesaria. Según esa asesoría, los pilotos fueron informados que deberían definir su reclamación de créditos laborales antes de cumplirse un año de su despido de hecho y les fueron presentadas varias opciones de estrategia para llevarla adelante. La gran mayoría de los miembros optó entre ellas por el juicio al Estado, el que ahora se conoce.

OFP por su parte, que sufrió hace muy poco tiempo el tremendo golpe de la decapitación de su principal referente, quien por las causas que lo determinaron no pasa ni cerca de la sede gremial y ya había sufrido anteriormente el alejamiento de otra pieza clave de esa organización, debió recomponerse a la fuerza y como el ave Fénix, resugir de las cenizas y por la visión no exenta de tozudez y compromiso de tres de sus principales dirigentes, apoyados por el grueso de los miembros, darle cuerpo a la utopía en ese momento o fantasía virtual de plantearle al gobierno la creación de una nueva aerolínea. Fueron a la guerra con dos escarbadientes y dedicaron prácticamente todo su tiempo a dos temas principales: el proyecto que ahora se conoce como Alas U y la lucha por mantener a los desocupados de Pluna S.A. percibiendo seguro de paro y complementos a cuenta del despido. Hay muchos funcionarios que ya cobraron la totalidad del crédito gracias a estas acciones. A la OFP o a sus dirigentes, por ese enorme esfuerzo y dedicación que no demandaba solamente tiempo sino también dinero que fue puesto del bolsillo de los dirigentes y en algunas oportunidades también por los afiliados, no les dio el cuero para también -como hizo ACIPLA-, unificar la estrategia legal en base a un asesoramiento en común. De ese modo, los funcionarios "de tierra" se fueron agrupando por afinidades o por casualidades y creemos que todos (o al menos la gran mayoría) también han hecho sus juicios o demandas, pero en ningún caso contra el Estado sino contra el Fideicomiso y Pluna S.A.

La bronca del PE de ahora, fue la los ex empleados de Pluna desde el 5 de julio de 2012

Da la casualidad que la oportunidad en la que aparece a la luz pública el juicio de 120 pilotos contra el Estado (no de ACIPLA) se da en el contexto que el Poder Ejecutivo está por otorgar de una buena vez los 15 millones del FONDES y la posesión de los tres CRJ900 que eran de Pluna.

Entonces, es muy fácil para el gobierno enojarse con los pilotos y dejar trascender que esa acción podría hacer caer definitivamente el proyecto Alas U.

Pero...

Tras la herejía del cierre de Pluna que cada día que pasa es más inentendible, para agravar aún más las cosas el gobierno ha mantenido la misma actitud que desde el cierre a la subasta del 1° de octubre de 2012: silencio total e inacción.

No hay ningún ex-empleado de Pluna que no se haya enterado de la posibilidad que existía que en algún momento el gobierno les exigiera renunciar a sus créditos laborales contra la promesa de recuperar sus empleos con la creación de una nueva compañía.

Podemos dar fe que si ello se hubiese planteado oportunamente, habría tenido quizás una respuesta sorprendente, dado que TODOS querían seguir trabajando en lo que estaban, porque a pesar de los gritos para la tribuna, la experiencia de Pluna S.A. en manos de LeadGate significó para los funcionarios trabajar a pleno, revistar en una empresa afiliada a IATA, tener code share con las mejores aerolíneas y cobrar sus salarios siempre, en tiempo y en forma, entre otros beneficios.

Pero el gobierno quizás sin darse cuenta, eligió el silencio y la demora y ello, genera incertidumbre. Todos querían seguir trabajando en Uruguay y los pilotos también pero mal podría hacerlo si no había empresa ni aviones que pilotar y se tuvieron que ir a Chile, a Panamá en los mejores casos pero muchos debieron irse a Indonesia y algunos a Etiopía y a Jordania y creemos que hasta a Vietnam.

¿Qué puede pasar?

Estamos seguros que de parte de los pilotos habrá adecuación a la realidad del actual contexto.

De parte del gobierno, si ello ocurre no debería haber ninguna otra reacción más allá de la subida de temperatura generada.

Pero...otra vez

Queremos creer que la demora en llevar a la práctica el préstamo del FONDES se haya debido a la burocracia estatal y no a la falta de convicción para seguir adelante con el proyecto.

Por eso, si los pilotos quitan la piedra que no pusieron adrede, sino que cayó allí por la inercia de los hechos, Alas U debería empezar a funcionar de una buena vez.

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