Este proceso organizado por la IATA, basándose en una metodología desarrollada por la Organización de Aviación Internacional Civil -OACI-, consta en que los clientes que deseen puedan hacer una contribución monetaria para compensar los daños ecológicos del carburante una vez calculada la cantidad de carbono que emite cada vuelo, esto tras reservar su billete.
Según informó Thai Airways, lo recaudado será destinado a proyectos ecológicos certificados por todo el mundo, como los que actualmente se están desarrollando en Perú Chile, Brasil Tailandia y Jordania.
en base a: travelupdate





