Este presupuesto limitado obliga a los romeros a ahorrar en costes básicos como el alojamiento, la comida, o el teléfono. Entre las previsiones de ahorro que se plantean antes de comenzar su peregrinación, un 27% de los encuestados mencionaron la utilización de Skype para comunicarse.
La utilización de este servicio de llamadas y videollamadas gratuitas por Internet no implica que estos usuarios vayan a comunicarse menos, ya que la mitad de los peregrinos llamará a su familia y amigos al menos una vez al diario, y un 25% se comunicará al menos cada dos días. Uno de cada tres romeros entre 18 y 24 años usará Skype en los ordenadores de uso libre que encuentren en los albergues o en puntos con Internet que hallen a lo largo del camino. Quienes tengan descargada la aplicación de Skype en sus móviles pueden llamar con tarifas muy reducidas.
Respecto a los otros conceptos en los que se ven obligados a ahorrar, muchos peregrinos harán uso de la red de albergues que se encuentra a lo largo de la Ruta, por su precio asequible. Para ahorrar en comida, aprovecharán para cocinar en las instalaciones de los propios albergues.
Skype también recoge una serie de recomendaciones aportadas por los peregrinos para hacer el Camino y opciones para mantenerse en contacto por muy poco dinero. La gran mayoría de los encuestados considera que en la mochila no puede faltar calzado adecuado, jabón y el saco de dormir. También hay que llevar imperdibles, para colgar ropa mojada en la mochila y que se seque durante el trayecto.
Para comer sin gastar en restaurantes, los romeros aconsejan consumir frutos secos, barritas de cereales o piezas de fruta durante la etapa. Cuando se llegue al destino de la jornada, comprar sólo lo que se necesite para comer y cenar y aprovechar las cocinas que hay en muchos de los albergues para prepararse algo más copioso. En cuanto a aspectos intangibles, los encuestados mencionaron que el Camino se debe realizar con ilusión, alegría, buen humor, fe y solidaridad. El 60% de las personas que han peregrinado a Santiago de Compostela repiten la experiencia una o más veces.
fuente: consumer.es





