Buonomo: Fondes “debe abrirse” a proyectos no autogestionarios
Martes, 25 Marzo 2014
Pedro Buonomo en estudios de Radio El Espectador.
Los exfuncionarios de Pluna agrupados en Alas Uruguay esperan desde hace meses un crédito que les permita comenzar a operar. Por su parte, los empleados de la textil Agolán están pendientes de la aprobación del proyecto que presentaron recientemente para relanzar la actividad de esa industria, que hasta ahora operaba la CND. En ambos casos, sus esperanzas están puestas en el Fondes, que desde su creación ha financiado a más de una decena de empresas recuperadas por sus trabajadores. Algunos sectores del gobierno lo ven como el primer paso para una “sociedad autogestionaria”. Sin embargo, algunas cámaras empresariales dicen que es “dinero tirado al vacío”. En diálogo con En Perspectiva, Pedro Buonomo, economista e integrante de la Junta de Dirección del Fondo para el Desarrollo (Fondes), comentó el funcionamiento y objetivos del órgano.
Una de las principales aspiraciones de José Mujica es que los trabajadores aprendan a autogestionarse. Sostiene, precisamente, que la “única liberación posible” para los asalariados pasa por asumir la responsabilidad de su futuro.
En línea con ese pensamiento, en 2011 nació el Fondes, que se nutre de una parte de las ganancias del Banco República y que otorga soporte financiero a determinado tipo de proyectos, priorizando aquellos en los que “la propiedad del capital, la gestión empresarial y el trabajo se conjugue en el mismo núcleo de personas”.
Pese al cuestionamiento de algunos sectores del empresariado tradicional, el Fondes ha solventado iniciativas emblemáticas como Envidrio o la ex Metzen & Sena, que involucran a cientos de trabajadores. Al día de hoy, otra decena de iniciativas están esperando por su apoyo, entre ellas la cooperativa de ex funcionarios de Pluna, que todavía no logra avanzar.
“El Fondes ha tenido como objetivo principal la creación y diseño de instrumentos, en particular financieros, que permitan apoyar emprendimientos autogestionarios”, sintetizó Buonomo. “Es una herramienta que apuesta por tener un espacio en el marco del sistema capitalista dominante”, agregó.
En ese sentido, el Fondes promueve “otro tipo de relación social productiva, otro tipo de valores, que generen fuentes de trabajo y otra forma de producción”.
El decreto reglamentario, vigentes desde fines del 2011, prioriza las empresas autogestionadas. Buonomo destacó el “importante componente político” que conlleva el Fondes. “Es el criterio del Poder Ejecutivo el que determina cuáles proyectos se aprueban, cuáles se apoyan, y cuáles se priorizan”. Al respecto, añadió la existencia de determinados criterios que apuntan a proyectos autogestionados.
Desde su funcionamiento, explicó, la vocación del Fondes se limitó a recuperar empresas, exceptuando algunos nuevos pequeños emprendimientos que empezaron desde cero. Éste último elemento, el surgimiento de nuevas empresas, “es un desafío clave” del órgano.
Sobre el sentido y razón de ser del Fondes, Buonomo dijo: “Tratamos de apoyar proyectos que en condiciones del mercado tradicional financiero sería muy dificultoso que obtuvieran los recursos necesarios para financiarse”. “Trabajamos con el concepto de aditividad”, completó, “por lo tanto, ofrecemos condiciones de acceso al financiamiento notoriamente más atractivas que el sistema financiero tradicional”. Sin lugar a dudas, aclaró, el Fondes “asume riesgos”, pero el órgano busca minimizar los efectos adversarios.
“Damos préstamos a largo plazo con una gracia de 10 a 12 años, cobramos un 4% de tasa de interés, hacemos un análisis técnico para poder determinar la viabilidad, y aplicamos la carga financiera que el proyecto pueda pagar”, resumió.
El Fondes se nutre de hasta el 30% de las utilidades netas anuales del Banco República luego de debitar los impuestos e intereses. “Los recursos que han venido suman 134 millones de dólares”, dijo. “La relación entre los fondos y los créditos marca que el Fondes ha venido trabajando y generando experiencia al apoyar proyectos sostenibles, de la forma más eficaz para el logro de los objetivos”, sentenció.
De 134 millones de dólares disponibles se han utilizado 40 millones, lo que arroja un trabajo “prudente”, en palabras del economista.
Consultado por el vínculo empresariado-Fondes, Buonomo aseguró que “nosotros tenemos relaciones con muchas instituciones y organizaciones sociales vinculadas a la autogestión, pero no particularmente con el sector empresarial”. “No hemos tenido ni el acercamiento ni la inquietud de organizaciones empresariales”, complementó. Sobre las críticas de ese sector, reflexionó: “Las empresas autogestionarias en Uruguay no son necesariamente más ineficientes que las empresas tradicionales (…) en contexto de crisis o recesión económica las cooperativas tienen el compromiso de los trabajadores con el proyecto”.
No obstante, señaló, “sí hay preocupación respecto a cuáles son los sectores más adecuados para este tipo de empresas comparado con las tradicionales”. Específicamente sobre las críticas apuntó que son “apreciaciones que tienen un alto componente ideológico”. “Nosotros entendemos que es necesario abrir el Fondes a otro tipo de emprendimientos no específicamente autogestionarios (…) inclusive para lograr más sinergia con la propia autogestión (…) el Fondes debe abrirse”, concluyó.
Vea el video de la entrevista completa.
Portal de América - Fuente: www.espectador.com