por Daniel Romagnoli, desde Miami

Por fuera un estilo renovado con aristas y planos rectos que  marcan un cambio, por dentro todo y más a lo que ya nos tiene acostumbrados el top of the line de la casa del óvalo. Y en cuanto a motorización, un producto más con el exitoso Ecoboost , en esta caso un V6 de 2.7 litros y una caja de 6 velocidades automática con shift.

Desde su presentación y ya en las primeras pruebas que supimos hacer con este motor en distintos vehículos, dijimos que Ford apuesta y en grande al éxito de un impulsor de seis cilindros, que marcando economía frente al ocho tradicional, pero potenciado y turbo cargado, habrá de dar dura batalla en el campo de la competición.

Y al respecto queda ya poco para las grandes batallas en Daytona y Le Mans que seguramente habrán de confirmar nuestra intuición.

En suma, Lincoln una vez mas se consagra en el mas alto de los segmentos.

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