Voluntarios ganan por goleada
Lunes, 07 Julio 2014

Hubo una avalancha de mails en la página oficial de la FIFA. Más de 100 mil. Todos solicitando ingresar a ese selecto grupo de "voluntarios", para poder ser parte de la Copa del Mundo Brasil 2014. Las inscripciones se abrieron primero para la Copa de Confederaciones, que también se disputó aquí hace un año, y fue el banco de pruebas para el Mundial.
SACRAMENTO radisson
Arapey 1250x115
MINTUR 1250x115 - B2
CIFFT 1250x115
SACRAMENTO - proasur
MINTUR 1250x115
TSTT-1250x115

por José Mastandrea

Ahí se hizo una primera selección y se empezaron a dar los primeros pasos de cara a lo que sería "la Copa de las Copas", así denominada por la Presidente Dilma Rouseff. Hombres y mujeres de todas partes del mundo se anotaron queriendo ser parte de la máxima fiesta del balompié.

La selección fue minuciosa. Se buscó el perfil para cada área, para cada tarea específica y se empezó con el proceso de selección. Hoy hay cerca de 15.000 voluntarios trabajando en el torneo, en los estadios, en los aeropuertos y en los hoteles designados por FIFA. Están por todos lados y son de diferentes nacionalidades: colombianos, chilenos, paraguayos, argentinos, uruguayos y por supuesto brasileños, van y vienen con una sonrisa, siempre atentos, siempre dispuestos a ayudar, a evacuar cualquier tipo de consulta, atendiendo necesidades o pedidos.

Están uniformados. Pantalones deportivos azules, remeras multicolor y con sus acreditaciones a la vista reciben a todos (periodistas, futbolistas, autoridades, turistas e hinchas) de la misma manera.

En Maracaná, uno de los escenarios más importantes de la Copa y elegido para la gran final, aparecen por todos lados. En el ingreso al estadio esperan todos detrás de un largo mostrador y allí tienen a mano líneas especiales de buses, del metro, paradas de taxímetros, traslados al IBC y también una pequeña guía de la ciudad.

Fabianne, Ariel, Eduardo, Gabriella, Fabiano y Marcos son brasileños, Jinbo es chino, y llegó a Brasil para unirse al voluntariado de la Copa del Mundo. Como él, hay cientos que también dejaron su país para ser parte del torneo más trascendente.

Todos son mayores, porque esa es una de las reglas: haber cumplido los 18 años al menos tres meses antes del inicio del torneo, pero no hay límite de edad y muchos de los voluntarios superan los 40 años, aunque trabajan a la par de los más jóvenes.


Son parte de la fiesta y la disfrutan a su manera. Ni siquiera tienen entradas para los partidos. Algunos, los más afortunados, trabajan en las tribunas o en zonas con vistas al campo de juego, pero saben que están trabajando y no pueden distraerse ni un segundo porque hay supervisores en todas las áreas.

La mayoría habla inglés, pero no todos. Y son muy pocos, los menos, los que hablan español. De acuerdo a sus perfiles, cumplen diferentes funciones, aunque saben que no habrá ninguna remuneración, están cumpliendo con un sueño, ser parte del Mundial.

Los voluntarios también juegan su Mundial. Y, en base a su respeto y calidad del servicio, lo están ganando por goleada.

Portal de América - Fuente: www.ovaciondigital.com.uy

Escribir un comentario

Promovemos la comunicación responsable. No publicamos comentarios de usuarios anónimos ni aquellos que contengan términos soeces o descalificaciones a personas, empresas o servicios.