Derecho al turismo o turismo obligatorio
Jueves, 02 Diciembre 2010
El derecho a hacer turismo ha sido consagrado por las Naciones Unidas y ojalá algún día esto deje de ser letra muerta y todos los seres humanos tengan acceso a sus múltiples beneficios, pero de todos modos, no puede ser obligatorio.
Nos recordamos de un tío, artesano él, que vivía encerrado en su taller y sufría de agorafobia.
Un día lo convencimos a salir y se maravilló viendo los “rascacielos” del barrio de cinco o seis pisos, pero a las pocas cuadras pidió para volver a su casa y su taller.
Mucha gente está muy cómoda en su ambiente y no quiere o no necesita salir.
Hay libros escritos al respecto.
Del mismo modo no toda la gente, no todas las comunidades están obligadas a recibir turismo.
Leímos ayer que uno de los problemas que enfrenta Kosovo para recibir turistas, es el que una etnia minoritaria, los Goranis no quiere recibir turistas, porque ellos no lo entienden, no entienden que haya que cobrar algo a sus visitantes, su sentido de la hospitalidad no se lo permite.
Así como las Cuevas de Lascaux no pueden ser visitadas, asi como los paganos no pueden visitar La Meca, un lugar que vive de las peregrinaciones, o como Maastricht pretende renunciar al “porroturismo”, creemos que hay casos que se debe poner un límite a la curiosidad, bendita curiosidad, del turista.
Y no hablamos con el egoísmo de quien vive en una región, un país y una localidad felizmente abierta a los visitantes.
En el mundo sobran lugares donde desarrollar el turismo sin violentar a sus pobladores.
Hace unos días escribimos en este espacio: “No todo es turismo” estamos convencidos de ello, como también lo estamos de los beneficios de una actividad a la que hemos dedicado toda nuestra vida.
Por eso, al menos dejemos a los Goranis de Kosovo mantener esa admirable costumbre de practicar la generosidad y la hospitalidad.
Portal de América





