por Sergio Antonio Herrera, desde Montevideo - @DelPDA
El texto precedente fue publicado en el espacio editorial de este sitio el pasado Miércoles 20 Julio de 2016 a las 02:42 bajo el título En Uruguay no hay "Animales sueltos", la jaula es enorme artículo en el que dejábamos en evidencia una vez más la autocensura quer se imponen los medios y muchos profesionales del periodismo en nuestro país cediendo a la presión de los grandes anunciantes como los organismos estatales, que pagan la publicidad "con el dinero de todos los uruguayos" como les gusta decir a los dictadores de las redes sociales y también y fundamentalmente, ante algunos empresarios fuertes de plaza.
Ese colega a quien por ética y por códigos de la profesión no mencionamos con nombre y apellido esa vez, se llama Daniel Castro y en aquella oportunidad, el programa en el que nos canceló la entrevista "por orden de arriba" para entrevistar a un supuesto brasileño que nunca entrevistó, era Telebuendía.
¿Por qué ahora cambiamos y damos a conocer su nombre?, porque lo volvió a hacer.
Casualmente el pasado miércoles 27 de julio, recibimos un mensaje suyo directo, vía Twitter donde nos decía: "Tu teléfono me da fuera de servicio, estimado Antonio. ¿Podrías llamarme? gracias!!
Lo llamamos y allí supimos que lo que necesitaba era información acerca de Alas Uruguay y tal vez, pensó que era una buena moneda de cambio quedar bien y decirnos que nos esperaba en la radio hoy martes a las 10 para hablar sobre ello. Viendo el "acuse de recibo", aplicando los más elementales métodos de "promoción al alcance", pactamos con nosotros mismos amnesia sobre lo anterior y hasta le invitamos a que concurriera con sus equipos de la radio y de Telenoche a la jornada celebrada este lunes 1 de agosto como festejo de los 10 años de periodismo INDEPENDIENTE (a él se lo mandamos en minúscula).
Ni en la mañana al NH Columbia ni por la noche al Crystal Tower fue nadie de El Espectador o de Telenoche.
Anoche cuando nos íbamos a dormir, extrañados por el hecho que desde producción del programa, como se estila, no se nos hubiese reconfirmado la cita. resolvimos mandarle un mensaje a Castro para confirmar si debíamos ir esta mañana a la radio.
La primera respuesta fue: "Tenía que era mañana, consulto y te digo" y enseguida la segunda: "10.20 hoy acá en la radio gracias y disculpas".
A las 10.20 con puntualidad inglesa llegamos a la radio.
Pasadas las 10.45 nos hicieron pasar a estudios donde no estaba Castro. Exactamente a las 10.53, luego de haber escrito en nuestro Facebook un minuto antes "Tomada de pelo, son 10.52 y aún no salí al aire, me quedé por respeto a la audiencia mía, no a la de la radio", iniciaba Martín González (no Daniel Castro), la minientrevista que reproducimos:
Cuando abrimos la puerta del estudio para retirarnos nos interceptó Daniel Figares, el colega conductor de Rompkbzas quien se presentó, nos estrechó la mano y nos dijo "Lo felicito, ha dicho exactamente lo que hay que decir".
Ya fuera de la emisora le mandamos un mensaje a Castro: "Lamentable lo tuyo Daniel. Me decepcionaste una vez más".
La respuesta esta vez, llegó de inmediato: "Nunca sospeché tal bajeza sin pedir una explicación. Disculpas por el momento y de lo otro me quedará el amargo recuerdo de haberme equivocado otra vez. Rompiste todos los códigos. Una enorme desubicación. Lamento. Doy por cerrado el tema".
Si no estabas Castro, si desapareciste, ¿a quién debía pedirle explicaciones? ¿de qué? ¿de basurear a un colega y no dar la cara? Eso es romper códigos.
¿De entrevistar a una ministra que miente y no repreguntar? Eso es romper códigos.
¿De colaborar con el OTRO RELATO instalado desde el Estado y los grandes anunciantes? Eso es romper códigos.
Yo también doy por cerrado el tema. Contigo personalmente. El otro no, el de la denuncia del OTRO RELATO, no, de ese no me bajo. Suerte en pila.
Nos vemos.
Portal de América