por Sergio Antonio Herrera, desde Salinas, Uruguay
Las corporaciones del turismo deberán mirar hacia adentro y preguntarse que están haciendo...bien.
Cuando obtengan sus respectivas respuestas, las que aún no lo hicieron deberán ponerse de acuerdo con sus pares y comenzar a nuclearse en una entidad superior de cada país y traer a su lado a los otros actores fundamentales de la actividad como los casinos, los emisores de las tarjetas de crédito, las trasnacionales que venden sus productos a los turistas, las constructoras, los transportistas y demás jugadores involucrados directa e indirectamente con la actividad, para de esa forma ser verdaderos interlocutores válidos con los gobiernos de sus respectivos países y conducir a la actividad, con mentalidad empresarial con fines de lucro, dejando de limitarse a cumplir lo que hasta ahora, les dictan desde los organismos estatales que orientan al sector en cada nación.
Deberán darse directorios o comités ejecutivos idóneos y generar los recursos para sostener cada una, un staff ejecutivo que las haga funcionar en lo cotidiano.
Una vez alcanzado ese estatus, las corporaciones de la actividad privada deberán realizar sus propias tareas de investigación y estadística para de esa forma dejar de improvisar y comportarse con las estrategias adecuadas.
Conociendo los verdaderos números, no necesitarán creer como ahora como si fuera la verdad revelada lo que dicen los respectivos ministerios de turismo, de transporte y de economía de cada lugar y mucho menos lo que difunden a nivel global los organismos internacionales con la más absoluta impunidad.
¿Hay alguien habilitado a nivel corporativo a discutirle a la OMT la veracidad del número de llegadas internacionales que cada año sube como por arte de magia?
¿Verdad qué no?
Como contrapartida, sabiendo que esas cifras son la mera suma de los reportes recibidos de cada país, sabiendo que no se trata de datos científicos sino que se logran en base a encuestas y que a su vez la OMT no ejerce ningún tipo de auditoría, inspección o simple chequeo en los países acerca de esa información aportada, ¿hay alguien que seriamente pueda decir que cree en esos números?.
Los ministerios de turismo en conjunto con los de Educación ¿evalúan a los institutos terciarios y universitarios que enseñan los diferentes aspectos del turismo?.
Los parlamentarios, los funcionarios, los comunicadores, ¿tienen algún ámbito que les actualice respecto a la evolución del turismo y del transporte?
¿Cómo pueden legislar, administrar y comunicar correctamente de espaldas a la actividad?
¿Es que hoy me levanté y descubrí que pasaba todo esto?
¿O...?
Nos vemos.
Portal de América
Las grandes mentiras de nuestra actividad
Martes, 14 Julio 2015
www.estafasmlm.com
Hace mucho tiempo lo venimos diciendo y cada día que pasa se confirma más nuestra advertencia, la suerte de las agencias de viajes convencionales está echada. O se reconvierten, olvidándose de las comisiones y apuntando a la asesoría y al cobro de fees o seguirán desapareciendo. Las inmobiliarias volcadas al sector turístico deberán crear sus propias páginas dentro del modelo de economía colaborativa convirtiéndose en símiles de airbnb y dejando de echarles la culpa a los porteros de los edificios. Los hoteleros, luego que se les escapó la tortuga y no supieron frenar la sobredosis de hormigón que elevó la oferta y les pulverizó la rentabilidad, además de rezar mucho, tendrán que entregarse sin condiciones al revenue management o buscar inquilinos permanentes.





