El servicio de las 19.30 del martes 2 de enero pasado, del buque Francisco de Buquebus fue cancelado sin aviso previo. Directamente el barco no estaba en el puerto de Montevideo cuando los pasajeros se presentaron a embarcar. Un pasajero argentino que tomó el bus de la empresa en Punta del Este, luego de arribar al puerto capitalino y esperar una hora y media, relata que un oficial de Prefectura fue quien les informó que debían subir a un bus para ser trasladados a Colonia. No compareció nadie de la empresa y tampoco hubo explicaciones de ningún tipo. Con bastante demora pudieron embarcar en un ferry de la empresa y llegar a las 02.45 de la madrugada del miércoles 3 a Buenos Aires en vez de a las 22.30 del martes. El afectado en cuestión nos hizo llegar copia de la carta enviada a la empresa. Nos preguntaron ¿Cuál es el poder de Buquebus que se dan el lujo de no dar la cara y mandan a un oficial de Prefectura para hacernos subir al bus sin siquiera darnos tiempo de comprar algo para comer?. Nuestra respuesta es que la empresa tiene mucho poder, más del que muchos imaginan y mucha complicidad en el silencio de las autoridades y de la casi unanimidad de los medios, so pena de quedarse sin su publicidad. Cada vez que López Mena anuncia alguna de sus nuevas maquetas, toda la prensa se hace eco, pero cuando como ahora, incumple y destrata a sus pasajeros, todos calladitos, al igual que pasaba con los reiterados aterrizajes de emergencia y distintos incidentes de BQB en 2014 que este medio fue el único que los denunció, motivo por el cual los tres ATR de esa empresa terminaron entrando a mantenimiento, para jamás volver a volar con esa marca. Compartimos texto de la carta del pasajero afectado mientras nos preguntamos si Buquebus mantendrá el eslógan que dice "Cuando subís, ya llegás"...