Por su parte la Asociación Argentina de Derecho del Turismo (AADETUR) consigna que  ocho de cada diez quejas de los turistas no se resuelven. El mismo informe  señala que el principal motivo de quejas es el transporte aéreo y el segundo los alquileres de temporada (Clarín, 14/3/2011).

Pero más allá del análisis de las quejas de los turistas, lo que ya se ha hecho en los referidos artículos, queremos señalar la importancia de su correcta atención y el tratar de subsanar errores, cuando ello es posible.

Una importante compañía de alquiler de autos, prevenía a sus funcionarios de  Mr. Nice Guy- el Sr. Tipo Macanudo- esa persona que pese a no haber recibido un buen servicio, no efectuaba ninguna reclamación...”ese cliente, no va a volver a utilizar nuestros servicios y será un mal propagandista de la compañía”.

Por otra parte una queja bien atendida, bien puede ser una nueva venta y una “forma de fidelización de clientes” dicen los expertos en marketing y nuestra experiencia.

Por otra parte para muchos hoteles, los formularios con comentarios de clientes son la mejor forma de control de calidad e incluso la estimulan.

Algunos colocan formularios específicos, preguntando sobre el estado de las habitación (que anda, que no anda o que falta) y hasta dan premios de puntos para quienes la completan.

”Es la forma más económica que encontramos para cuidar el mantenimiento de las habitaciones” nos confió un hotelero.

Todos sabemos que en las quejas o en todos los comentarios de un viajero hay un gran componente subjetivo, favorables o no.

También sabemos que muchos de los inconvenientes que sufre el viajero, no son fácilmente subsanables, e incluso, en el caso de los alquileres de temporada,  cuando se realizan fuera del sistema formal, son difícilmente controlables.

Pero como bien dice la ya citada columna de Opinión de nuestro sitio: es bueno que cada uno asuma las responsabilidades que le corresponden.

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