por Lic. Alejandro Spera - @alejandrospera en Twitter

Así es que nos encontramos con pasajeros que hoy reclaman cambiar sus tickets aéreos sin penalidad, desconociendo la “letra chica” respecto a las condiciones de emisión de sus pasajes.  Existe carencia de información respecto a la situación de cobertura que se ven obligadas las aerolíneas en el marco de los convenios internacionales que regulan la industria.  Allí cobra relevancia, por ejemplo, el tema de la conexión de vuelos, especialmente cuando los tramos fueron comprados en internet, en aerolíneas que no poseen convenio de “código compartido” y operan en la modalidad punto-a-punto.  En estos casos, si la primera aerolínea (“feeder”) no cumple con la programación estipulada, puede perderse definitivamente la posibilidad de embarque en el siguiente vuelo.  La falsa idea de que la aerolínea que incumple debe cubrir los costos de alojamiento, comidas y traslados frente a una pérdida de conexión puede generar discusiones interminables en los mostradores con el personal de contacto en el momento de la verdad.  Hay una multiplicidad de situaciones, contingencias e imponderables meteorológicos, y para comprenderlos, es necesario -nuevamente- conocer esa letra chica y mucho sobre reglamentaciones, tanto de la industria como de defensa al consumidor en cada país.

Parte de ese paradigma tiene que ver con el servicio a bordo ofrecido.  Aún recordamos la foto de antaño, donde la comida ofrecida en clase económica era copiosa, compuesta por finas delicatessen, junto a una selección especial de bebidas alcohólicas.  En ese sentido, muchas aerolíneas incluyendo las más tradicionales han migrado hacia el concepto impuesto por las low-cost, que venden sus alimentos, ofreciendo mayor libertad de consumo y mejora de la calidad de lo ofrecido.  Una de las compañías que se destacaba en la región por su servicio de a bordo era la brasileña VARIG:  acompañaba una cena con pan caliente, como complemento de la calidez en su atención por parte de los tripulantes de cabina hacia los pasajeros.

El equipaje también sigue dando que hablar en la materia, ya que décadas atrás existían algunas restricciones que en la práctica no se aplicaban, y la flexibilidad al momento del check-in era mucho mayor.  Hoy día, las piezas de equipaje se controlan bajo estrictos procedimientos, en cumplimiento de las prohibiciones respecto a mercancías peligrosas, y otras prebendas de seguridad.  Las compañías liberan alguna pieza de equipaje, teniendo muy presente las limitaciones en cuanto a tamaño y peso; el exceso de equipaje significa un ingreso tanto para la empresa como para los empleados (que muchas veces cobran comisiones al facturarlo). 

En la actualidad las compañías aéreas pretenden innovar en cuanto a sus servicios, buscando mayores fuentes de ingreso para sus operaciones que arrastran el peso de importantes pérdidas operativas, en muchos casos.  Basta recordar que el margen de rentabilidad según la IATA (Asociación Internacional de Transporte Aéreo) apenas supera el 2%, por lo que es preciso buscar nuevas formas de financiamiento operativo.  Allí aparece el concepto de “ancilliary revenue” (ingresos auxiliares) que es todo aquello por lo que la compañía cobra servicios variables que aportan a la facturación operativa.  Entonces surge el cobro de las llamadas al call-center de asesoramiento personalizado, la facturación del equipaje, la asignación de asientos estratégicos en el plano del avión (incluidos aquellos localizados en las filas de emergencia que poseen mayor “pitch”), la comida y bebida a bordo, el sistema de entretenimiento, servicio de Wi-Fi, desembarque diferencial, salas vip, etc)

La idea de volver a volar en aquellos legacy carriers que ofrecían algo así como un “all-inclusive” en la experiencia de vuelo ya no es la práctica de la industria, es sólo la nostalgia que produce el contraste con esta nueva realidad de vuelo.  Gracias a la evolución de la aviación comercial, se ha incorporado un sinfín de servicios innovadores, mayor tecnología, confort, y aviones de última generación.  En esta línea, cada día en Portal TECNO les ofrecemos novedades en materia de aplicaciones móviles que facilitan procesos, brindando nuevas soluciones a los pasajeros en sus viajes.  Pero muchas veces la contraprestación conlleva la creación de una pequeña tarifa asociada.

En este “día de la Nostalgia” en el que revivimos momentos asociados a emociones compartidas, queremos recordar y homenajear a algunas como PanAm, Braniff, TransWorld, National, Texas International (por mencionar apenas algunas compañías americanas que ya no están), o VARIG, Cruzeiro, Vasp, PLUNA, Ladeco (en la inmediatez de la región) que fueron verdaderos íconos del transporte aéreo y contribuyeron a enaltecer la industria de la aviación comercial del mundo. 

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