Ahí nos estaba esperando el presidente de la Liga Independiente de guías de turismo de Río de Janeiro, Arnaldo Bichucher, quien nos acompañó durante todo el dia.
Desde el hotel partimos hacia el parque Bondinho Pan de Azúcar, desde donde pudimos disfrutar de una impresionante vista panorámica de toda la ciudad.
Luego, el almuerzo fue en una de las más reconocidas churrasquerias cariocas, llamada Fogo de Chao, que desplegó un servicio muy bueno, con una variedad de cortes de carnes asadas todas muy bien condimentadas y una vista espectacular.
A continuación subimos al Corcovado en el tren y pudimos apreciar al Cristo Redentor en toda su inmensidad. El día estaba muy húmedo por lo que la vista desde el lugar estaba disminuída por la bruma.
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