por Manuel Ángel Méndez
El Comac ARJ21-700 ha pasado los últimos 6 años de su desarrollo en vuelos de prueba. "ARJ" en el nombre significa Advanced Regional Jet y hace referencia justo al uso regional interno que se le dará al aparato. China ha fabricado en el pasado más aviones, pero siempre para otros clientes. Airbus, por ejemplo, tiene una línea de ensamblaje del A320 en Tianjín. El ARJ21-700, sin embargo, será el primer avión comercial diseñado, fabricado, ensamblado y certificado en China.
Probablemente lo primero que sorprende es su similitud respecto al McDonnell Douglas MD-10/DC-10. No es casual. La compañía Comac fabricó en el pasado los MD-80 y, según publicaciones como Aviation Week, el diseño del MD-80 fue una "inspiración", aunque no directamente una copia.
No es la primera vez que China intenta construir su primer avión comercial. Lo intentó a finales de los 70 con el Shanghai Y-10. El aparato llegó a volar en prueba 130 veces entre 1980 y 1984 antes de que el proyecto fuera cancelado: en ese momento no había demanda ni mercado interno para semejante aparato. Además, los fabricados por otras compañías fuera de China eran más modernos y eficientes.
Casi 40 años después, China quiere cambiar su papel marginal en el mundo de la aviación comercial. El ARJ21-700 cuenta con una capacidad de hasta 90 pasajeros. Otra versión mayor en desarrollo, el ARJ21-900, podrá acomodar a 115. Cuenta con dos motores traseros General Electric CF34-10A y una autonomía de vuelo de casi 3.700 kilómetros. La compañía Comac está desarrollando también otro avión mayor, el C919, que será más o menos del tamaño del Boeing 737-700, con capacidad para 158 personas, aunque no entrará en servicio hasta 2018.
De momento, el ARJ21-700 será el primer intento serio de China de colarse en la aviación comercial, y ya tiene clientes (más o menos). La aerolínea Chengdu Airlines (propiedad de Comac), ha comprado varias unidades para estrenar el próximo abril.
Portal de América - Fuente: es.gizmodo.com
