por  Lluis Mesalles

Pero, somos realmente conscientes de lo que signifia el dinero para cada persona. El dinero de por si, no tiene ningun valor, es solo un indice de medida para el valor que las cosas tienen para unos y otros. Lo que tiene valor no es el dinero, son las cosas que con el podemos conseguir.

Veamos, quien determina el valor de cada cosa, de cada acción, de cada idea? El valor lo ponemos nosotros mismos, de acuerdo a la utilidad que para nosotros tiene cada cosa. Todos tenemos alguna cosa de valor, todos tenemos valores propios, aunque no tengamos dinero.

El turismo es un ejemplo clarisimo de las diferencias en el valor de cada cosa. Para unos, normalmente los anfitriones locales, los productos y servicios turisticos tienen poco valor, porque les parecen habituales, banales y sobradamente conocidos. Pero para los visitantes estas mismas cosas pueden tener un mucho mayor valor. Y aprovechar estas diferencias de apreciación es lo que nos permite a los anfitriones recibir un beneficio, por diferencia de valor, cuando ofrecemos nuestros valores turisticos, sean productos o servicios.

Y esto me lleva a reflexionar que siempre, en todos los casos y situaciones, tenemos cosas particulares, de mucho valor para otros. Cosas que si sabemos ofrecer correctamente nos permitirán aprovechar esa diferencia de valoración en nuestro beneficio.

No tenemos mas remedio, ahora que empezamos un nuevo año, de tomar un tiempo para reconsiderar nuestros valores. Cuales son nuestros valores personales, empresariales o locales, más atractivos. Que cosas o cualidades tenemos que otros no tengan? Tratemos de potenciar los valores que son más atractivos para los demás, haciendoselos más asequibles, más cómodos, más interesantes. Lo que se suele designar como más competitivo.

No esperemos becas, ni limosnas, Conozcamos nuestro valor, y pongamoslo a valer.  

Portal de América - Fuente: boletin-turistico.com