¿Hasta cuando la sanata?

Deberían sorprendernos estas declaraciones de un ministro como Ernesto Murro acerca de quien, a pesar de no conocerlo personalmente tenemos la mejor de las impresiones pero como parte integrante de un gobierno que estuvo cuatro años "haciendo la plancha" desde el cierre de Pluna, lo primero que nos provoca es la expresión del título: "Esta película ya la vimos".

¿Recién ahora preocupa la conectividad, los puestos de trabajo y "las deudas con organismos estatales"?

¿Es que durante todo este tiempo en que "dejaron" que Alas Uruguay naciese guacha no sabían que iba a pasar lo que pasó?

¿El "abanico" de aerolíneas que estarían dispuestas a negociar por Alas Uruguay es similar al que anunció el exministro Pintado en la Torre Ejecutiva el 12 de setiembre de 2012 para la subasta de aviones y luego hubo que inventar al Caballero de la derecha?

¿Es de verdad que el gobierno piensa que existe alguna aerolínea en el mundo que va a venir a poner 20 millones de dólares para acceder a un AOC que viene con el Bonus Track de un sindicato que ha sido nefasto para los intereses de la aviación comercial uruguaya históricamente?

¿No ha tomado en cuenta aún el gobierno la lamentable imagen que dan  sus funcionarios aparentemente vinculados al tema cuando hablan de Alas Uruguay y la mencionan como Alas U y la presentan como aerolínea de bandera?

¿Cuándo el señor Dulcinelli se presentó ante el Poder Ejecutivo como interesado en Alas Uruguay no se le pidieron garantías reales por la deuda con el Fondes?

¿Cuál es la razón por la que deberíamos entender la sorpresa del gobierno de la fuga abrupta de LAW?

Alas Uruguay ya fue, hay que darle punto final

Mal que nos pese, como fuese anunciado oportunamente desde este sitio, luego del "Escándalo de Pluna" y el "Bochorno de ANCAP", habrá que asumir "El error Alas Uruguay".

Hay que darle correcta sepultura a este proyecto que nació mal y por ende, casi ni vivió. Quienes no saben manejar empresas, las chocan, es así de simple y el resultado no puede tener otro viso  que el trágico.

Si realmente preocupa la conectividad y los puestos de trabajo, hay que darle punto final a la historia Alas Uruguay y abrir la puerta para que vengan inversores reales, con expertise, a hacerse cargo de un mercado que "está ahí" esperando que alguien venga a explotarlo.

Lamentablemente el proyecto Amaszonas Uruguay por diferente razones tendrá muchas dificultades para desarrollarse de manera que pueda "acaparar" el mercado de manera que haga inútil la aparición de nuevos jugadores. Ya no tomó la iniciativa debida, ya no apareció la flota que debía haber aparecido y los destinos necesarios brillan por su ausencia. Ojalá se mantenga, ojalá pueda seguir ofreciendo fuentes laborales y aportando su limitada conectividad pero el campo es propicio para más, para mucho más y quedó demostrado entre el 2008 y el 2011 cuando operó la mejor Pluna de la historia, la que cerraron, la de la herejía.

Entonces, apostemos a la aparición de nuevos jugadores que los hay. Es verdad que Azul está interesado en tener una base en Uruguay pero no creemos que esté interesado en Alas Uruguay porque no le ofrece nada que esa empresa no tenga, así de simple. Hay interesados con base en Estados Unidos, los hay también desde España y esos empresarios, seguramente están aguardando que esté despejado el camino para poder venir a tramitar un AOC, solicitar rutas, seleccionar personal, es decir, venir a emprender un negocio como se hace en el mundo real. Quieren venir a negociar con un ministerio de Transporte y con la autoridad aeronáutica, no con un sindicato y mucho menos con una central de trabajadores. Así no funciona el mundo de la aviación comercial, se lo advertimos a todos los que nos quisieron escuchar desde le comienzo mismo de lo que terminó siendo Alas Uruguay. Las cooperativas no existen en la aviación comercial de verdad y los sindicatos tienen el papel que les corresponde, el de sindicatos, aunque suene perogrullesco.

O sea, la mala noticia es esa, los 15 millones del Fondes deben pasar a la cuenta política de quienes corresponda, y desde ya, el titular de la misma no es otro que el hablador itinerante más famoso del Uruguay y como él lo sabe todo, seguramente le encontrará la vuelta para devolvérselo "a todos los uruguayos" como reclaman los dictadores de las redes sociales.

Los proveedores-acreedores de Alas Uruguay, a quienes hay que destacar por su apuesta a colaborar con el proyecto, seqguramente que en el mismo momento que resolvieron darle crédito a Alas Uruguay sabían el riesgo que corrían y ellos mismos deben estar interesados en que esta burda historia termine cuanto antes para de una buena vez acceder a facturarle al próximo que venga. Así son los negocios.

Y los perjudicados de siempre, los trabajadores, también deberán entender que el sueño de Pluna no se transfirió a Alas Uruguay, que eso fue una mera utopía que tuvo un triste final. Sabemos de sobra que cuesta admitirlo, pero el mejor consejo que podemos darles es que actualicen sus CV y empiecen a mandarlos (si ya no lo hicieron) a otras aerolíneas o a otras empresas, porque la vida continúa y a veces, los sueños, sueños son, pero hay que seguir viviendo.

Portal de América