por Martín Kanenguiser

La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) debe terminar de reglamentar con otra resolución general los datos que deben aportar los operadores turísticos para el régimen que, paradójicamente, arrancó formalmente anteayer. Calificadas fuentes oficiales y del sector privado coincidieron en señalar a LA NACION que lo que abunda es la incertidumbre, aunque aclararon que la nueva restricción -consistente en no vender dólares a quienes viajan a países limítrofes- no provocó un cambio en los montos autorizados a las personas. El promedio es de US$ 70 diarios, aunque se presentan casos en los que resulta notablemente inferior; por día, la AFIP autoriza la compra de cerca de $ 12 millones.

La dureza, cada vez mayor, no se aplica con el mismo tenor a los organismos públicos y a las empresas, que tienen otro "código"; en ese sentido, pese a que el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, dijo que los funcionarios no deben dar cuenta de sus gastos en misiones oficiales, en realidad también deben pedir autorización a la AFIP y logran una mejor recepción que los particulares. Todo se hace sobre la marcha. "Estamos en plena implantación de la norma; les vamos a pedir que nos informen acerca de cada pasaje que emiten; esto al pasajero no le cambia nada, pero para los bancos y para nosotros significará más transparencia", dijo una fuente de la AFIP. Hoy, funcionarios del organismo que lidera Ricardo Echegaray recibirán a la Asociación Argentina de Agencias de Viajes y Turismo (Aavyt) para aclarar estos parámetros.

El presidente de la Aavyt, Fabricio Di Giambatista, dijo que "recién cuando nos reunamos con la AFIP tendremos un feedback más claro del procedimiento para poder cargar los datos". En cuanto al ritmo de viajes, dijo que "no hubo un freno pero tampoco es una avalancha, por lo que es importante brindar certidumbre".

Más duro, su predecesor, Tomás Ryan, afirmó: "Todo es más miedo para vender dólares, mientras se sigue castigando la llegada de turistas del exterior, que son los que dejan divisas en el país y generan crecimiento y empleo", se quejó el empresario.

"Los argentinos seguimos viajando al exterior y castigando al turismo receptivo con una pérdida que ronda los US$ 400 millones. La Argentina está carísima, sobre todo por los impuestos al sector", subrayó. Desde una agencia de turismo importante y una línea aérea confirmaron que las reglas aún no son claras, pero aclararon que la AFIP todavía no comenzó a exigirles los datos contenidos en la última resolución del organismo. Por esta norma, quien quiera viajar con divisas compradas en el mercado oficial deberá cargar en la página de la AFIP los datos del operador turístico y la forma de pago, entre otros.

En la AFIP admitieron que "algunas empresas están enviando datos en forma voluntaria, pero todavía no es algo sistemático". Una vez que se termine de implementar este capítulo de las restricciones -que comenzó a fines de mayo con la resolución 3333 de la AFIP-, correrán los plazos para las sanciones si las empresas no giran esos datos.

El artículo 39 de la ley de procedimiento fiscal indica que las multas van de 500 a 45.000 pesos por el incumplimiento de los requerimientos para presentar declaraciones juradas de los regímenes informativos obligatorios.

Por ahora, las casas de cambio se preparan para el aumento en las transacciones en las monedas de la región, que para los bancos resulta muy poco rentable. Fuentes del sistema admitieron a LA NACION que "la venta de dólares sólo se logra muy pocos días antes de que la persona viaje".

Multa
El tope de la sanción que les aplicará la AFIP a los operadores turísticos que no brinden los datos que se les exigen es de $A 45.000.

Portal de América - Fuente: www.lanacion.com.ar