Hace 30 años que dirige el destino de la operadora mayorista Vie Tur. Su actividad lo ha unido a este medio por algo más de dos décadas y nos dio un primer reportaje allá por 1997, revista que fue atesorada por Crupnicoff en su archivo y que hoy, quince años más tarde sale a relucir, con los cambios propios del paso del tiempo (menos cabellos blancos quizás) pero con muchas cuestiones que siguen tan vigentes como entonces.

Como presidente de la Asociación Argentina de Operadores de Viajes y Turismo –AAOVyT- ¿podés comentarnos qué posición tomó la Asociación ante las medidas de la AFIP para la compra de divisas para viajar?

Si miramos objetivamente la situación desde fines de octubre del año pasado hasta hoy, no cambió nada. La realidad es que esa inquietud estuvo dada más por lo que se instaló dentro de los medios, y en el sentir de la gente, que lo que pasó realmente. No me consta que ningún operador, que esté enmarcado dentro de las normativas que exige la Ley, haya tenido algún inconveniente en girar a sus proveedores en el exterior el importe de las facturas. A partir de ahí casi todos los operadores, y no digo el 100% porque ni hicimos una encuesta, ni conozco a todos, pero los que involucra la AAAVyT que son el porcentaje más grande de producción, tanto en emisivo como en receptivo, siguió trabajando normalmente y la gran diferencia fue que desde el momento en que se generó un mayor control cambiario todos empezamos a recibir pesos. Hubo un cambio de modalidad de gestión, ya que hasta ese momento prácticamente cobrábamos todo en billetes de moneda extranjera y motivado por el mismo mercado se fue pesificando automáticamente todo. En ese momento la AAOVyT sacó una suerte de sugerencia a los asociados sobre la forma de actuar y que tenía que ver con, de alguna manera, pesificar las operaciones al cambio vigente de cada día, que es el cambio oficial, con un par de centavos más que representan los costos de transferencia al exterior. De tal manera que yo diría que todo el mundo se alineó dentro de la situación. Puede haber habido algún caso, incluso se lo había manifestado el director de la AFIP a Fabricio Di Giambattista, de que había agencias que estaban cobrando otro valor de dólar, pero no pasó con los operadores que nosotros representamos. A punto tal que a través de la AAAVyT hicimos una encuesta durante varias semanas sobre cuál era el tipo de cambio que usaban los operadores y la mayoría estaba alineado a esa política, porque en realidad ningún operador es una casa de cambio, todos quieren trabajar y si la moneda que existe es el peso se vende en pesos.
A través de la cuenta bancaria el peso que se transfiere al exterior para pagar un servicio automáticamente es convertido al cambio oficial, no hay razón para no operar normalmente.

Creo que hubo una presunción de la gente que extrapoló lo que estaba pasando con el tema de conseguir dólares para atesoramiento y lo que sucedía a poder comprar un viaje en dólares. Esto surgió del mercado, no de los operadores. A partir de la Resolución 3333 se vio que hay un mercado súper sensibilizado. Creó una inquietud temporal y a las tres semanas ya todo transcurría normalmente.

Yo veo que en la práctica la operatoria es la normal para la época y puede haber destinos que estén con mayor o menor ocupación pero que están obedeciendo al comportamiento del mercado. No veo, ni siento, ningún síntoma de alarma o preocupación. En lo fundamental no hay problemas.

¿Qué opinión te merece el proyecto de Ley de Agentes de Viajes?

No me quiero referir a los aspectos minuciosos de la Ley porque en realidad, y tal como se dijo en el último Congreso de la AAAVyT, al cual asistí como invitado como presidente de la AAOVyT, coincido en que hay una gran diferencia de la actual, producto del trabajo conjunto que se generó entre la AAAVyT y el Ministerio de Turismo que dio el espacio para adecuar la Ley a un sentido mucho más realista y creo que, en algunos aspectos, se han logrado cosas que atienden las necesidades de la actividad. El tema de la exclusividad de la venta a través de las agencias de viajes me parece un tema importantísimo, es también fundamental el haber definido la figura de la intermediación, que es un aspecto muy relevante. Hay un tema con el cual tenemos un problema bastante serio y que la Ley de alguna manera trata de resolver pero no creo que lo resuelva totalmente, que es el tema del transporte aéreo. Podríamos decir con el transporte en general, pero es lo que más nos preocupa a nosotros que vendemos productos con aéreo, porque de última vivimos una responsabilidad solidaria sobre algo que no podemos manejar. Yo creo que debemos tener todas las responsabilidades inherentes a la contratación de un vuelo chárter si esa empresa no  está reconocida, y se produce un incumplimiento. Pero si uno va a contratar un servicio que está regulado por todas las leyes de la actividad, el contralor escapa a las posibilidades de quien contrata. Yo no puedo revisar nada, si la autoridad de aplicación le permite volar y desarrollar un tráfico regular yo debo confiar y emitir un pasaje que no es otra cosa que un contrato entre la línea aérea y el pasajero. Si eso está bien hecho la responsabilidad por el incumplimiento, el overbooking, la falta de servicio por las razones que fueran, tiene que ver con la línea aérea, no tiene que ver, ni con el operador, ni con el agente de viajes. En la práctica cuando hay una situación de ese tipo y hay una reclamación los que más a mano están son el agente de viajes, y atrás de él, el operador. 
En esa cadena de hecho los que estamos más expuestos somos nosotros y las líneas aéreas encuentran una vía de escape que a nosotros no nos satisface.

La figura del Operador Responsable es real. Ya no escuchamos que haya problemas muy seguido, están los avatares de la industria, de comercio, del riesgo empresario donde a uno le puede ir bien y a otro mal, pero lo cierto es que los operadores que están en el mercado hoy, la gran mayoría son gente seria. 

El proyecto se debatió en un ámbito excelente, porque debatir una ley que parte del Ministerio de Turismo, en un Congreso de Agentes de Viajes, donde quienes exponían eran las autoridades del Ministerio encargadas del tema, junto a los integrantes de la AAAVyT que estuvieron formando parte de esa comisión del MINTUR, con la presencia de todos los que quisieron estar y opinar, y pudieron hacerlo, a mí me parece una demostración de modelo de gestión excelente y felicito al Ministerio y a la AAAVyT por el trabajo realizado. Después todo es opinable, y el trabajo empieza ahora porque cuando entre en la Cámara se iniciarán los debates y ahí es donde hay que tener presencia para esclarecer a los legisladores, como se hace en toda las leyes, y participar. 

¿Qué te pareció el Congreso de AAAVyT realizado en Salta?

Fue un excelente Congreso, y fue exitoso porque tomó los temas que realmente le preocupan a la gente. No hubo divagues, ni temas que tienen que ver con otros aspectos que no sean los que verdaderamente nos preocupan y por la calidad de las exposiciones, serias, en donde hubo posibilidad de intervenir, de expresar ideas, eso generó un marco muy favorable y espero que el próximo parta de este piso porque jerarquiza a toda la actividad.

A tres años del inicio del Instituto de Formación profesional de AVIABUE, ¿qué balance podés hacer?

A mí me invitaron a participar desde la AVIABUE y formé parte de un Consejo de cinco miembros que trabajamos todos  a la par, y pasaron los tres años más difíciles de la gestación de un proyecto que me parece excelente. Hace tres o cuatro meses dejé mi puesto de presidente del Consejo y me reemplazó Jorge Oaco, ahora soy vicepresidente. A fin de año el Instituto va a tener su primera promoción y se abre una nueva etapa, porque primero el año pasado recibimos la incorporación al sistema de enseñanza por lo cual entregamos títulos oficiales, y después porque hemos logrado modificar el plan de estudios con una adecuación importante que le quita al alumno una carga de horas presenciales y hace más moderno el modelo educativo. El IFSeT nace, no para competir en el marco de la enseñanza privada con nadie, la AVIABUE hizo todo el esfuerzo económico que no fue poco, pero lo soportó y hoy estamos mucho más cerca del proyecto que soñamos. Nuestro propósito es que la gente que se reciba sea un técnico que esté preparado para sentarse en una agencia de viajes o un operador y empiece a trabajar; que sepa operar un GDS, que sepa vender un destino y atender un cliente. Y es un escalón previo a una Licenciatura.

Me parece un logro fantástico para una entidad empresaria que haya logrado ese cometido, y que lo hace con la filosofía de que ningún alumno por una razón económica va a quedar excluido. O sea que está hecho con un sentido educativo y social también.

Vie Tur tiene como filosofía la capacitación, ¿verdad?

Lo hicimos desde siempre y una de las cuestiones que tienen que ver con el desafío de la modernidad y lo que hoy nos plantea como ámbito de gestión, eso no tiene posibilidades de prosperar si el recurso humano utilizando las herramientas no está formado. No hago más que reafirmar lo que todos sabemos: la inversión de capital, la industria, todo termina en el ser humano, y me parece que el tema de la capacitación tiene que ser un esfuerzo colectivo de todos los ámbitos. Uno puede tener un país con la mejor infraestructura pero si la gente no está a la altura de poder usar los recursos, no sirve.
Todo lo que nos pone internet como servicio, que es maravilloso, lo único que requiere es que estemos capacitados para entenderlo. Conseguir información lo hace cualquiera, lo importante es tener la capacidad de procesarla.

Nosotros los convocamos para capacitarlos sobre un destino, no sobre nuestro manual de ventas, les explicamos todo lo que sabemos, traemos a los especialistas y cuando se van les damos el manual, porque queremos que nos compren, pero ha venido gente por más de ocho años y nunca nos han comprado. Pero no perdemos las esperanzas.
Lo hacemos convencidos de que de esa manera jerarquizamos nuestra profesión. El 28 de junio estamos haciendo una capacitación sobre Estados Unidos, que presenta novedades en sus destinos y van a venir especialistas en Miami, Orlando, Nueva York, California, Puerto Rico, etc. a dar los tips de cada uno de esos destinos e inclusive vendrán de la Embajada para contar sobre los trámites de la visa, y de Aerolíneas Argentinas para hablar sobre la conectividad aérea.

¿Cuáles son los destinos a los que viaja el argentino ahora?

Por una cuestión de estacionalidad Europa, pero no solamente los países centrales, Italia, Francia, España, porque ahora se abrió mucho a los países del Este, que hace 10 años eran una rareza. Ahora se están incorporando los países Bálticos y en menor medida Escandinavia, limitados en parte por el tema del aéreo.
En los últimos años se incrementó mucho el turismo a China, un destino al que los argentinos le perdimos el miedo, donde cada vez hay más guías en español, y han ganado en calidad y cantidad de infraestructura.

En forma incipiente vienen creciendo los destinos de Asia, como Vietnam y Camboya.  Medio Oriente se mantiene como un destino tradicional, aunque con algún inconveniente producido desde la Primavera Árabe, aunque no tuvimos mayores problemas. Pero los operadores de Medio Oriente ya sabemos que la realidad que refleja el diario no necesariamente es lo que sucede en el país, y hay que saber dimensionar los acontecimientos para llevar tranquilidad a los pasajeros.

Portal de América - Fuente: www.mensajeroweb.com.ar