De acuerdo con un comunicado, Rolls-Royce indicó que, tras un cuidadoso análisis, no seguirá trabajando en el proyecto de Boom. Lo anterior ya que determinó que actualmente la aviación comercial supersónica no es prioritaria para Rolls-Royce.
Por su parte, Boom agradeció en un comunicado los esfuerzos del fabricante inglés. Sin embargo indicó que el diseño de motor propuesto por Rolls-Royce no es la opción más atractiva para los operadores del avión supersónico. La empresa estadounidense también señaló que está próxima a anunciar la selección del nuevo socio para el desarrollo de los motores del Oveture, el cual buscará ofrecer una opción confiable y rentable.
La apuesta de Blake Scholl, fundador y director de Boom, es crear un avión sostenible que se acerque a los estándares que busca la industria. Si bien es cierto que los vuelos supersónicos generan más carbono, se espera que el Overture opere con combustible 100% sostenible (SAF).
Recordemos que Boom busca fabricar aviones de alta velocidad, para cubrir el mercado que dejó el Concorde, que realizó su último vuelo en noviembre de 2003. El Overture, que tiene proyectado entrar en servicio para 2029, se convertiría en el avión comercial más rápido del mundo. Con una velocidad de Mach 1,7 (2,100 km por hora), podría transportar entre 65 y 88 pasajeros.
Amerian Airlines se mostró interesada el Overture, por lo que firmó un contrato de compra por hasta 20 aeronaves, con opción a 40. Con la adquisición de este modelo, el tiempo de vuelo entre Nueva York y Londres sería de 3:30, lo que sin duda será atractivo para los pasajeros.
Portal de América - Fuente: Transponder 1200