Según Excelsior, los propietarios de estos inmuebles hospedan en promedio o utilizan en promedio 24 noches al año; es decir, no es un hotel.
Pero si tú tienes una casa y tienes una casa muy bonita y puede ser que tengas ahí un par de habitaciones que nunca utilizas, pues entras a esta plataforma y quién te dice que no, un día tienes alguien que hospeda. ¿Cuáles son las ventajas?, las ventajas es que no es informal, está con una regulación, sabes quién se hospedó —porque hay los requisitos de la plataforma—, lo que ustedes están viendo ahí es algo que existe, que hoy es una realidad”, indicó el jefe de gobierno.
Airbnb, que fue calificada por Mancera Espinosa como el Uber de los hoteles, tiene presencia en la metrópoli desde el 2012 y continúa su expansión.
Tan sólo en 2016 generó mil 574 millones de pesos.
Durante 2016 el hospedaje por esta vía en la metrópoli creció 174 por ciento y la actividad económica que la empresa generó fue de mil 574 millones de pesos a través de los ingresos de los anfitriones y los gastos realizados por los paseantes durante su visita.
El mandatario capitalino señaló que la plataforma digital de alojamiento compartido no representa competencia para el sector hotelero, porque sus servicios se enfocan a un grupo específico de la población con características y necesidades diferentes a quienes normalmente hacen uso de un cuarto de hotel.
Son dos nichos diferentes. No estás compitiendo, reitero, con los hoteles, el turismo que llega a un hotel, el que llega con su familia a un hotel, va a seguir llegando a un hotel con su familia en la Ciudad de México. Este es otro tipo de turismo. Pero lo que nos permite es tener seguridad, regulación y, por supuesto, establecer un parámetro en el ranking internacional para la Ciudad de México”, explicó el mandatario capitalino.
Por su parte Airbnb señaló que el pago de impuestos a la administración capitalina no añadirá cargas burocráticas al alojamiento compartido. Ni el huésped, ni el que ofrece su propiedad tendrá que pagar más de lo que actualmente establecen las políticas de la empresa la cual indicó que este protocolo de colaboración que regulará su funcionamiento en la CDMX ya existe en París, Milán, Barcelona, Moscú y Sao Paulo.
Con esta iniciativa, la capital se suma a la lista de más de 275 jurisdicciones en todo el mundo donde Airbnb recolecta y remite impuestos a nombre de sus anfitriones y huéspedes.
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