Los turistas que viajan entre los dos países dejan cerca de U$S 2.000 millones en los cofres de Argentina y Brasil. Pero ambos precisan buscar más turistas de otros países para garantizar más recursos y generar empleos. Por ello la ofensiva conjunta, que ya se viene delineando hace algunos meses. Este martes 18 en Madrid, durante la FITUR,  fue dado un paso importante para concretar estas acciones.

Lummertz, Santos y Beltrão, acompañados de Valentin Gilligan, secretario general de la Presidencia Argentina, definieron un cronograma con cuatro puntos de actuación. Los dos países van a promover conjuntamente el destino "Ruta de las misiones jesuíticas", donde los visitantes podrán conocer las ruínas y saber un poco más de la historia de esas misiones instaladas hace más de 400 años por padres jesuítas españoles en el sur del Brasil y en los vecinos Argentina, Uruguay y  Paraguay.

Entusiasmado, el ministro Santos intentará garantizar la presencia del Papa Francisco, que es argentino, en el lanzamiento de la ruta, en setiembre. El ministro argentino va a enviar una propuesta a Itamaraty para extender a los turistas norteamericanos, exentos de visa en Argentina, la posibilidad de pasar al Brasil y quedarse algunos días. Sería una prueba por dos años, y si fuese buena, se continuaría.

Otra acción sería la formación de un grupo bilateral para hacer una visita de trabajo con la intención de atraer a los turistas chinos. Son 120 millones de turistas de ese país viajando por el mundo anualmente. Para Brasil sólo vienen 55 mil. Brasil y Argentina también se van a lanzar de forma conjunta para ser sede de la edición 2018 del Global Tourism Economy Forum, un gran evento del sector que en 2016 se hizo en Macao, Asia.

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