Según swissinfo.com, esta nueva compañía, que debe comenzar a operar en el invierno boreal de 2017 en vuelos regionales y en el verano de 2018 en los transcontinentales, apunta a operar vuelos de menor coste, aun sin llegar a ser trayectos 'low cost', según la compañía.
Esta filial de Air France-KLM se posicionará en rutas "estructuralmente deficitarias o cerradas en los últimos años", agrega el grupo en un comunicado.
El plan, bautizado como 'Trust Together', fue presentado al personal de la compañía por el presidente del grupo, Jean-Marc Janaillac.
'Trust Together' deberá permitir a Air France-KLM "captar nuestra parte de crecimiento en el transporte aéreo, mejorando la competitividad de nuestras actividades", declaró Janaillac en una cita del comunicado. "Debemos iniciar una nueva dinámica para volver a ser líderes en nuestros mercados", agregó.
La nueva compañía "constituirá la respuesta del grupo a las compañías del Golfo que se desarrollan con bajos costes en los mercados clave en que Air France-KLM desea continuar creciendo", pero donde sus operaciones son deficitarias, precisa el comunicado.
Para implementar el plan, Janaillac tomó las riendas del grupo el miércoles, secundado por Frank Terner como director general, mientras que el hasta entonces presidente de la compañía, Frédéric Gagey, pasó a ser director financiero.
El grupo se enfrenta desde hace años a una competencia sin cuartel con las compañías del Golfo dentro del segmento mixto del tiempo libre y los negocios en el sudeste asiático.
El grupo no reveló el nombre de la futura compañía.
En este segmento mixto mantendrá, indica, estándares comparables a los de Air France en términos de calidad.
La compañía contará con 10 aviones para trayectos de largo recorrido para 2020 y explotará un 30% más de rutas comerciales.
Air France-KLM apunta con su plan estratégico a transportar s 100 millones de pasajeros y un volumen de negocio de 28.000 millones de euros para 2020, en contraposición a los 26.000 millones de 2015.
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