por Ramón de Isequilla, desde Andorra
La primera alocución estuvo a cargo de la anfitriona, la Ministra de Turismo de Andorra que comenzó afirmando que en su país el turismo representa el 40 por ciento del PIB, valor realmente impresionante comparado con el resto de los países, que en los mejores casos miden cuatro veces menos. Resaltó, que los objetivos de Andorra en su caracter de Secretaría Pro Tempore de la Segib para este bienio, están precedidos por el concepto de ¨Aprender los unos de los otros¨, recogiendo el mandato de la última reunión en Guatemala sobre el desarrollo sostenible de la Agenda 2030.
Andorra, una de las democracia más antiguas del mundo está embarcada en una estrategia de desestacionalización y diversificación de la oferta turística, con respeto a las tradiciones y al patrimonio cultural y natural.
Destacó el rol de la Academia de la OMT, con sede en Andorra la Vella desde 1998 bajo el nombre Fundación Themis, lider en el área de conocimiento del turismo, con la cual nos relacionamos desde Punta del Este en varias oportunidades.
Aseveró que hay que promover la prosperidad, el crecimiento económico, la solidaridad, el desarrollo inclusivo, la igualdad de género y la sostenibilidad ambiental. El turismo es un sector creador de riqueza, pero muy frágil, al cual debemos proteger.
Continuó la presentación la Secretaria General Iberoamericana Rebeca Grynspan, agradeciendo a los organizadores del encuentro y al país anfitrión. Encaró sin preámbulos el tema del coronavirus, afirmando que va a ser un año difícil para todos y presumió que en la agenda de los asistentes, ya figurarán planes de contingencias, para enfrentar las consecuencias del virus, que deben seguir líneas estratégicas de emergencia, contención y estímulo, para lo que desea el mayor de los ánimos y que sepan que cuentan con la Segib.
Esas estrategias deben estar dirigidas, a que está coyuntura, no se convierta en algo estructural para el sector turístico. Primero hay que pasar la emergencia de salud y luego dedicarse a la recuperación económica, no debiendo ni perder el rumbo ni la visión de cómo tenemos que enfrentar el futuro. El coronavirus es un shock exógeno al sector turismo, no se está sufriendo por causa del turismo
Cuando el virus pase, el turismo continuará creciendo más rápido que el PIB, augurando una rápida recuperación, dialogando sobre las innovaciones que podemos realizar para que la contribución a la recuperación sea más rápida.
Tuvo palabras muy destacadas sobre la realidad iberoamericana, reflexionando que los que viajan al extranjero dentro de la región, encuentran un cambio de clima pero no de espíritu, estamos en otro país pero nos sentimos en casa, ¨Iberoamérica es sentirse en casa fuera de ella¨.
La postura de la Segib, para la próxima Cumbre de Presidentes está contenida en 10 líneas estratégicas que sentarán las bases de la tarea de los próximos años.
Las ideas base consisten en el enfoque en la gente de la comunidad anfitriona y los trabajadores del sector, mejorar sus salarios, crear nuevas dinámicas de productividad, atendiendo la estacionalidad laboral, que afecta las pensiones de los trabajadores del sector, integrar las comunidades locales para que el turismo no ponga en riesgo sus formas y tradiciones y sea una fuente de inclusión, pensando en el turismo como parte de una larga cadena de valor, todo ello en clave de innovación.
Un tema que va a estar muy presente en la Cumbre de Presidentes es el impacto de la gastronomía en la Agenda 2030, que es liderado por la OMT y el Basque Culinary Center.
Culminó su presentación lanzando una idea, que me impactó, y creo deberíamos profundizar en ella ¨Crear un relato iberoamericano del turismo¨, tomando como punto de partida el hecho que la identidad iberoamericana es un crisol de identidades.
El cierre lo realizó el Jefe de Gobierno de Andorra, destacando que su país de sólo 80 mil habitantes recibe 8 millones de visitantes anuales, dato de por si singular.
Para terminar, lanzó un aviso a los navegantes, aseverando que los responsables turísticos, deben ser conscientes de las consecuencias que pueden acarrear una mala gestión turística, debiendo ser su primera preocupación dar con la medida perfecta entre la calidad y la cantidad.
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