La nueva Marsans despedirá a 1.500 trabajadores
Lunes, 14 Junio 2010 00:00

Los nuevos gestores de Marsans preparan el pico y la pala para poner en marcha la fórmula del enterrador. El primer paso es vender activos, y están a punto de hacerlo con Hotetur; el segundo es deshacerse de la plantilla, y ya han dicho que quieren despedir a cerca de 1.500 empleados y cerrar oficinas en proporción.
Arapey 1250x115
Fiexpo 2024 1250x115
SACRAMENTO radisson
Mintur verano 1250x115
SACRAMENTO - proasur
TSTT-1250x115
CIFFT 1250x115

El siguiente paso afecta a los acreedores.
El mismo día –el jueves pasado por la mañana- que se difundía un comunicado dando a conocer el nombre de Ángel de Cabo, como nuevo dueño de Marsans, el director general de la empresa, Iván Losada, avanzaba al comité de empresa los planes de la nueva propiedad y los pasos a dar. Unos pasos que siguen lo que HOSTELTUR  adelantaba como la “fórmula del enterrador”.

El primer paso es vender activos, es decir, todas aquellas empresas del grupo Marsans que se puedan colocar por separado. Y la operación que parece más cercana es la venta de la cadena hotelera Hotetur, operación que ya tenían bastante avanzada los anteriores dueños –Pascual y Díaz- y cuyas gestiones han acelerado en estos días De Cabo y Losada. Hay varios posibles compradores.

Y es de esperar que intenten también la venta de otras marcas, como Marsans Portugal y Crisol. En este sentido, según diversas fuentes cercanas a la operación consultadas por este diario, el grupo Orizonia está muy interesado por hacerse con Marsans Portugal, dado que contribuiría a su proyecto de expansión en el mercado luso, ya que a la filial portuguesa no parece haberle salpicado la situación que se vive en España.
Por otro lado, y en cuanto a Viajes Crisol, aunque el interés de Orizonia es menor, también existe, y pasaría por prescindir de la marca y sumar las oficinas a la red de Viajes Iberia.

Despidos y cierres masivos

El segundo paso es propiciar despidos masivos de personal y cierres de las agencias de viajes. Según señaló Losada, ya manejan la cifra de cerca de 1.500 despidos, lo que supondría el 60% de la actual plantilla de 2.500 empleados que tiene la empresa (después de la salida voluntario de más de un millar). Unos despidos que se harán a través de un ERE.

En este sentido, y según especifica un comunicado del viernes del comité de empresa a los trabajadores, “desde la Dirección General [Losada] de la empresa se ha solicitado a los distintos directores regionales que sondeen cuántos empleados podría estar inscritos en una teórica lista de ERE”. No obstante, el comité indica que “el ERE no nos ha sido prestando”, e informa que esta semana Losada presentará al comité “un plan de viabilidad en el que es posible que aparezca una petición de ERE”, y advierte que “debe estar justificado dentro de ese plan de viabilidad”, además de tener “que negociarse” con el comité. El comunicado concluye recomendando que no se elabore ninguna lista.

Simultáneamente a los despidos se irán produciendo cierres de oficinas, cuyo volumen se puede situar en torno al mismo porcentaje del 60%. Unas oficinas que también se intentarán vender o traspasar a otras redes de la competencia que puedan estar interesadas.

Pleitear hasta el aburrimiento


El tercer paso de la fórmula del enterrador afecta a los acreedores. El objetivo de los nuevos dueños de Marsans es, por un lado, regatear grandes porcentajes de quita de deuda con unos proveedores. Y, por otro lado, con otros proveedores iniciar pleitos con el objetivo de alargar al máximo los procesos, para lo que tienen previsto reforzar su equipo jurídico. 

El último paso, y objetivo final, es la total liquidación, habiendo conseguido rentabilizar todo el proceso con esas ventas a trozos, intentado ir difuminando poco a poco las deudas -a través de cambios de sociedades y titulares- en un complicado ejercicio de ingeniería jurídico-mercantil. Y partiendo de que a los nuevos gestores no les ha costado nada el grupo Marsans, ya que no se ha producido venta, sino absorción de deuda. Con lo que el encargo recibido por parte de Gonzalo Pascual y Gerardo Díaz para garantizar sus respectivos patrimonios personales, ha quedado satisfecho.

Y en cuanto al pretendido plan de viabilidad, de momento nada hace pensar que se vuelva a la normalidad de la actividad, ni que se tengan intención de hacerlo, ya que en IATA no han recibido ninguna llamada de los nuevos gestores que haga pensar que tengan intención de pagar los 25 millones de euros necesarios para recuperar la licencia para vender billetaje aéreo (20 millones de aval y cinco de las ventas de los 20 primeros días de abril).

fuente: José Manuel de la Rosa-hosteltur 

Escribir un comentario

Promovemos la comunicación responsable. No publicamos comentarios de usuarios anónimos ni aquellos que contengan términos soeces o descalificaciones a personas, empresas o servicios.