El colega Reinaldo Azevedo, quien afirma que a pesar de todo la Copa se hará en Brasil, en su informe dice por ejemplo que:

* Los estadios de Corinthians en San Pablo, Arena Das Dunas en Río Grande do Norte y Arena Da Baixada en Paraná, ¡no se terminarán NUNCA!!!.

* El proyecto de reforma del Estadio Nacional del Distrito Federal , no tenía previsto la instalación de "bobadas" como el césped, la iluminación, las butacas y dice irónico: "Piense bien amigo lector, ¿para qué un estadio necesita césped...?.

* De los más de 27,5 billones de reales previstos en inversión para todas las obras de la Copa FIFA, hasta mayo solo se habían gastado 500 millones...

* Brasil prometió realizar 50 obras de movilidad urbana para facilitar el tránsito y acceso a los estadios y hasta el momento del informe solamente habían iniciado cuatro...

Y continúa Azevedo: "se preguntará el lector si yo afirmo que la Copa se hará igual ¿cuál es el problema?. Hay atraso ahora pero las cosas después entran en un ritmo adecuado. Y yo digo que no es tan así y todo Brasil lo sabe, Río fue sede de los Juegos Panamericanos de 2007. Las obras de infraestructura para recibir la competencia estaban presupuestadas en R$ 400 millones. De atraso en atraso, de incompetencia en incompetencia, de sivergüenzadas en sinvergüenzadas, quedó todo para última hora. ¿Resultado?, el evento costó 10 veces más, cuatro billones y un montón de ladrones llenaron sus bolsillos con el dinero público".

El autor sigue: "hay otros detalles escandalosos. Vuelvo al comienzo: ¿Brasil va a hacer la Copa de 2014? ¡la hará si!, lo que pasa es que toda esa negligencia elevará escandalosamente los costos. Ya está en curso un esfuerzo para que el Tribunal de Cuentas sea blando con esta corruptela, en nombre de la honra de la patria. Un ejemplo: el Arena Amazonia aún está en fase del terraplén como se ve en la foto que ilustra el artículo. El Tribunal analizó contratos de R$ 200 millones; sólo en esa "rebanada", detectó un  sobreprecio de R$ 71 millones. Ese estadio además, es el ejemplo de la locura que atrapó a esta gente. Pronto, podrá albergar 44.500 personas. ¿Bueno para la Copa?, puede ser. Después, será destinado al campeonato local, donde la media de público del torneo amazonense es inferior a mil pagantes. En este año en el partido que atrajo más gente, el que se dio entre Peñarol y Nacional: 2.869 testimonios. Adivinen quien pagará la cuenta ahora y después...

Azevedo remata el artículo diciendo: "es el "lulo-petismo" (Lula y PT) rumbo al 2014: falta de planeamiento, incompetencia, megalomanía y corruptela. Los cofres públicos pagarán la cuenta. Algo hay que hacer o el vejámen será verdadero. Sugiero la contratación de la empresa de Antonio Palocci. Los costos pueden subir bastante más, pero dicen -ese resuelve-".

Si tenemos en cuenta además, las increíbles falencias organizativas de la final de la Libertadores entre Peñarol y Santos en Pacaembú, donde a la prensa se la destrató y lo que es peor, se la ignoró y a la hinchada visitante poco menos que se le ubicó fuera del estadio, las perspectivas, de cara al torneo mundial, no son nada halagüeñas.

Pero, Brasil es Brasil, integra el BRIC, es una nueva potencia mundial, es el Imperio del Norte Próximo y además, tiene a Itamaratí y quizás, a Neymar.

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