Tal cual lo veníamos anunciando los días de Carnaval produjeron una avalancha turística sobre numerosos centros turísticos, era previsible:

* Reimplantación del Feriado en Argentina.
* Crecimiento del mercado brasileño y tipo de cambio favorable.
* Buen desempeño de las economías regionales.
* Espectaculares días de verano.

Todo lo venimos señalando en forma repetida.

Lo demás, dependía de las propuestas, la relación calidad - precio y su comunicación.

Todos estos acontecimientos, si coinciden con feriados, tienen una parte del éxito asegurado. Lo otro depende del acontecimiento en si y del marco que se cree a su alrededor.

Distintos tipos de acontecimientos religiosos, artísticos, culturales o deportivos ya tienen su público.

Los viajeros ya saben que en muchos casos, las ciudades anfitrionas se visten de fiesta y se vuelven más atractivas de lo que suelen ser.

Los ejemplos sobran. La industria turística no puede perderse entonces la oportunidad de recibir más visitantes, que se queden más días y que utilicen más servicios, para beneficio de la industria local y de toda la comunidad.

Insistimos en los partidos de la Copa Libertadores, en los festejos del Bicentenario de Paraguay y Uruguay, la Feria del Libro en Buenos Aires, el Festival Lollapalooza en Santiago, el Centenario del Descubrimiento de Machu Picchu, o Quito como Capital Cultural.

Son solo unos pocos.

Las instituciones públicas y privadas, los empresarios turísticos son los principales responsables de crear el clima propicio, comenzando por sus páginas web, para que estas oportunidades no sean desaprovechadas.

Por eso seguiremos insistiendo en aprovechar al máximo todo festejo, como el próximo día de San Patricio en Buenos Aires, aunque se nos trate de “fiesteros viejos”.

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