por Eliseo Sequeira

Esta reunión marcó el inicio del trabajo de la Comisión Binacional para la celebración de los cien años del primer Mundial de Fútbol. La postulación se presentará formalmente en el Congreso de la FIFA, el 30 y 31 de mayo, para que el mundial se vuelva a realizar (aunque sea en parte) en el lugar donde se efectuó el primero.

La idea entusiasma, y mucho, pero despertó todo tipo de "opinólogos", desde los que consideran que es muy fácil, hasta los que la ven como una misión imposible.  Ni muy, ni tan. Afortunadamente hay quienes ponen a disposición su conocimiento, adquirido en la Universidad de la calle.

Es así que el periodista deportivo y conductor televisivo Juan Carlos Scelza inició una serie de Conferencias tituladas "Fanáticos, Uruguay 2030, fútbol moderno profesional". En ella resume aquellos testimonios e información relacionada al fútbol, recogida para el programa "Fanáticos" que conduce desde hace más de tres años: 41 países, 72 ciudadees y 38 clubes e instituciones.

En forma metódica y detallada desgranala evolución que han tenido las instituciones deportivas, los estadios y los recursos que mantienen a unas y otros. También detalló la evolución de los requisitos de la FIFA, así como los impactos de la comunicación.

Los ejemplos de infraestructuras no solo fueron de Europa, sino que también de nuestros vecinos Argentina, Brasil y Chile. Actualmente la mayor parte de los estadios son estructuras multifuncionales inteligentes. La primera que tendrá nuestro país de ese nivel será Antel Arena.
La evolución de las comunicaciones es meteórica. En los juegos de Beijing se subieron 900.000 imágenes desde móviles. Cuatro años después, en Londres, las imágenes subidas fueron 23 millones, 24 veces más.

Para Brasil 2014, el costo de los estadios rondará los U$ 3.680 millones, el doble que Alemania 2006 y dos veces y media Sudáfrica 2010. El costo de cada uno de los 12 estadios (incluída la remodelación del célebre Maracaná) ronda entre los 293 y 550 millones de dólares.

Capacidad local para la realización de las obras existe. Sin ir más lejos, las obras del estadio de Paraná, Brasil, son dirigidas por un estudio de arquitectos uruguayos.

La decisión de la sede del 2030 no será inmediata, pero tal vez no demore mucho. Recordemos que además de Brasil 2014, ya está designada Rusia para el 2018 y Quatar para el 2022. Y ambos países ya están empezando a preparar sus infraestructuras. Ello significa que toda la experiencia que podamos ir generando, ya sea con el Antel Arena o con el estadio de Peñarol, será bienvenida. Y no nos olvidemos de desterrar a los violentos de las canchas.

Finalizaba Scelza indicando que realizar tal cual muchas de las acciones que él mostró, parece imposible para nuestro medio. El desafío será adaptarlas al mismo, y al tiempo, que sean funcionales a las normas internacionales. Y con esa idea se deberá trabajar, la de construir y sumar.

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