por Ramón de Isequilla Real de Azúa, desde Berlìn, Alemania

Las imágenes de Messe Berlín, el predio ferial donde se realiza anualmente ITB, "dan ganas de llorar"

Abarcamos en nuestra conversación una amplia gama de temas relacionados con el turismo, los cuales intentaré resumir:

Coronavirus

No podíamos eludir el virus que se ha convertido en el centro de atención del mundo, pero lo tratamos ni con una posición negacionista, pues es un asunto muy grave, ni tampoco con ribetes apocalípticos, bandazos que están dando los medios en las últimas horas, sino describiendo objetivamente las cosas que están pasando hoy en Alemania, digo hoy, pues mañana el panorama puede cambiar totalmente.

Las consecuencias actuales son mediáticas y económicas, desde el punto de vista sanitario la vida es totalmente normal, sin mascarillas ni mayores cambios en la vida cotidiana. Mediáticas por el alud de noticias que trasmiten los medios de comunicación y desplazan cualquier otro tema por importante que sea, creando un “pánico escénico “.

Económicas si, y muchas, la cancelación de eventos, sobre todo la ITB, están produciendo pérdidas cuantiosas en toda la cadena de valor y un parate total en la llegada de turistas; vuelos, aeropuertos, tiendas y restaurantes semi vacíos, sin que se hayan tomado aun ninguna medida restrictiva por parte de los gobiernos estatales, que son los que tienen el poder de decisión y no el gobierno federal. Pensar que sólo la cancelación de la ITB, pese a que muchos operadores concurrieron igual a Berlín a intentar salvar sus negocios, dejó la ciudad con un aspecto que nunca se había visto.

La feria Internorga de Hamburgo, de gran importancia para los intereses uruguayos, se postergó creando pérdidas del orden de los 28 millones de euros para sus organizadores y expositores.

En algunas ciudades menores se produjo un desabastecimiento de productos de primera necesidad, como harinas, latas, no perecederos y artículos de higiene,  por temor a tener que guardar cuarentenas y no poder concurrir a los centros comerciales a adquirirlos.

Las grandes empresas, tomaron la medida de no permitir el acceso a sus oficinas a personas ajenas a su staff, al cual controlan diariamente, cancelando todas las reuniones presenciales, sobre todo con personas provenientes del exterior, ya que las empresas alemanas están tan internacionalizadas, que es de uso cotidiano la visita de personas provenientes de otros países y continentes.

Descriptas estas realidades, pasamos al análisis de lo que realmente interesaba a este “equipo” de uruguayos en Alemania, el futuro pos ccoronavirus y qué puede aportar nuestra delegación en Berlín, de acuerdo a su experiencia y entusiasmo por servir los intereses del país.

Futuras ediciones de ITB

De nada sirve el esfuerzo e inversión que realice el Estado, si no es acompañado por el sector privado. Que en el stand de Uruguay esté solamente un jerarca, un funcionario y una empresa receptiva, no sólo es un gasto inútil sino una pésima imagen país.

Los stands deben ser más importantes, vistosos, atractivos y sobre todo estar llenos de operadores ofreciendo sus productos.

Los comentarios que les llegan desde los actores alemanes, consisten, en que es muy bueno tomar contacto con funcionarios del gobierno, les da seguridad y la imagen de un país serio que respeta sus compromisos, pero ellos quieren hacer negocios y los negocios se hacen con los empresarios no con el sector público.

Por experiencia propia, se que es muy difícil movilizar a los operadores turísticos uruguayos y a sus débiles instituciones sectoriales. El negocio de las ferias, invento alemán, esta sustentado por el poderoso sector empresarial, ellos determinan los objetivos, proveen los fondos y la logística necesaria y luego en última etapa, el estado termina apoyando con la promoción y cociendo los flecos sueltos que no pueden completar los privados.

Una agenda comercial no puede tener origen en un despacho ministerial, tiene que surgir de las necesidades sectoriales y el estado remitirse únicamente a facilitar, tender puentes, ordenar, descubrir oportunidades de mercado en el mundo y promocionar el país y sus servicios.

Nuestra representación en Berlín ha tenido muy buenas experiencias en otros sectores de la economía, con Uruguay XXI, INAC y últimamente con INAVI, en la forma de sus presentaciones y las poderosas delegaciones de casi un centenar de empresarios, que no pasaron inadvertidos en las ferias que concurrieron.

Me pregunto si sería un disparate, pensar en una futura ITB con una presentación de Uruguay cómo país con toda la fuerza de su turismo, sus carnes y sus vinos, con un Uruguay XXI, un INAC y un INAVI apoyando al Ministerio de Turismo, pero dejo la pregunta flotando.

En la coyuntura 2020 pre-coronavirus opiné que quizás los más conveniente, sería poner en la congeladora ITB y WTM por un año y hacer un gran lanzamiento de Uruguay en FITUR 2021 y una vez desembarcados, con una fuerte renovación de imagen, ampliando los productos, y mostrando una “agresiva” política promocional, volver a ITB y a WTM con más fuerza y solvencia, pero todo esto queda para un escenario post-coronavirus.

Folletería, prensa y alianzas estratégicas

Pese a todo lo que se dice sobre que lo importante es promocionar en la web, la folletería es la folletería y para determinadas circunstancias es irreemplazable. En este tema están muy bien provistos en calidad y cantidad en nuestra delegación en Berlín.

El rol de la prensa es fundamental y debe profundizarse la relación con la misma, alimentándola de información e invitando a determinados medios especializados al país para que lo conozcan y difundan, hecho que ha ocurrido los últimos años, como el caso del periodista Hardy Grune, que terminó publicando un libro sobre los equipos de fútbol de Montevideo.

El círculo virtuoso de producto, comercialización, y conexiones adecuadas, debe completarse con prensa, herramienta fundamental para llegar al público consumidor.

Es obvio la necesidad de profundizar alianzas estratégicas con el Mercosur, sobre todo para mercados lejanos, pero hay una alianza dirigida a el mercado alemán que es fundamental y es con Chile. El turista alemán, el más numeroso de occidente, tiene lazos muy profundos con Chile y es su destino favorito en Sudamérica, esto nos da una oportunidad, por estar nuestro país de camino, para explorar acciones conjuntas.

Finalizamos nuestra charla hablando sobre los segmentos de golf, caza, polo, actividades ecuestres, que se han promocionado los últimos años y deben profundizarse, y de una forma más agresiva, inclusive el fútbol, ya que los alemanes son fanáticos de este deporte.
Nos recordaron que el jabalí es plaga al igual que en Uruguay y hay un mercado muy importante para trabajar.

Están en contacto permanente con los operadores mayoristas alemanes, que junto a los ingleses son los más poderosos del mundo y pueden armar interesantes agendas para nuestros empresarios y autoridades.

Nos retiramos con la satisfacción de saber que cualquiera sea la política que se adopte, Uruguay cuenta en su representación en Berlín con un “equipo” fantástico con muchas ganas de trabajar.

Embajador Gabriel Bellon, Ministro Paul Riezler, Traductor Dankwart  Northe, muchas gracias por vuestro trabajo y vuestra actitud, porque con un equipo como el de ustedes “salimos campeones”.

Mesas y sillas apiladas, puertas cerradas en Messe Berlín

Desolación en el predio

Así está Messe Berlín. Vacío, cuando debería estar rebosante a estas horas.

Ckeckpoint Charlie, la puerta entre las dos Alemanias para autoridades y militares

Cartel reminiscente


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