Los seguidores de la práctica nudista que frecuentan esta playa, en la zona oeste de la ciudad, se han felicitado por esta decisión. En realidad, la venían reclamando desde hace 20 años. «Hacía tiempo que los visitantes necesitaban seguridad y respeto», ha asegurado Claudio Hailuc, representante de los naturistas de Abricó, a la agencia Afp.

«Esta es una decisión valiente del alcalde, que quiere hacer de Río una referencia cultura y turística, sobre todo cuando se acercan los 450 años de la ciudad y los Juegos Olímpicos de 2016», asegura Paula Nogueira, practicante del nudismo en esta playa. Paula espera que el topless, que es corriente Europa, sea también autorizado en las playas de Río.

Hace un año, más de 2.000 personas confirmaron vía Facebook su preencia en un topless colectivo en la playa de Ipanema, en Río de Janeiro.

«Siempre he encontrado rara esta actitud puritana en Brasil, donde en Carnaval se ve a las mujeres desnudas en todas partes, en las portadas de los periódicos, mientras que el topless en la playa es un delito», dice a Afp la organizadora de este evento, Ana Ríos.

En la playa de Abricó -pequeña, lejos del centro y menos frecuentada que las playas míticas de la ciudad- siempre ha sido frecuente ver bañistas desnudos, pero hasta ahora lo hacían sin el reconicimiento legal. De hecho, en las redes sociales se pueden leer comentarios como este: «Se recomienda ir los fines de semana y fiestas, cuando hay personal de la Asociación. En esos momentos el nudismo es obligatorio y hay control para evitar situaciones incómodas. El estacionamiento es bastante complicado».

Portal de América - Fuente: www.abc.es