por Eliseo Sequeira

Pero los taxis aéreos, los fumigadores agrícolas, los talleres que mantienen y reparan el sinnúmero de aviones y avionetas privadas para transporte y deporte que hay en el país, las empresas que calibran los aparatos requeridos para el control de vuelo, los centros de instrucción y otras industrias auxiliares se nuclean en la Cámara Uruguaya de la Industria Aeronáutica (CUIA).

Esta Cámara, de la mano de su actual Presidente, el Cnel. (Met.) (R) Diego Ravera, acompañado por una activa Comisión Directiva, pasa por un período de crecimiento y desarrollo considerable. Y en este proceso, la comunicación hacia la sociedad no puede faltar.

En el sector hay más de 70 empresas (se reitera que no incluye las aerolíneas comerciales), las cuales en el año 2013 facturaron más de U$S 41 millones, de los cuales aproximadamente la mitad corresponden a la aviación agrícola.

El Uruguay cuenta con 27 aeroclubes y 10 aeropuertos internacionales. Los de mayor movimiento son Carrasco, Colonia, Durazno, Melilla, Melo, Punta del Este, Rivera y Salto.

Actualmente la CUIA, en el marco de la implementación de los LARs, que buscan establecer y operar un sistema regional de seguridad operacional en Latinoamérica (según lineamientos de la Organización Internacional de Aviación Civil), está poniendo gran énfasis en la vinculación con el sector formativo. Es así que hay un intercambio permanente con la UTU y UTU ETA, con visitas de alumnos e incluso, se está buscando implementar un sistema de pasantías. Pero también se apunta a una formación superior, y para ello se está preparando un convenio con la Universidad de la Empresa. Este, no sólo facilitará la formación en el país de socios de la CUIA, así como familiares y empleados, sino que les permitirá acceder a una red internacional de universidades, entre las que se encuentra una moderna Universidad del Aire en Chile.

Por otro lado, también analizan las herramientas de apoyo que brinda el Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional, así como mantienen permanente contacto con las instituciones públicas y privadas vinculadas a su actividad.

También buscan mantenerse actualizados en la realidad que atraviesan las empresas de aviación uruguayas, como BQB, Air Class y Alas Uruguay, pertenezcan o no a dicha Cámara, pues la actividad de las mismas están vinculadas a empresas que sí pertenecen.

Por último, integrantes de la directiva nos dieron la novedad que el próximo 19 de setiembre, habrá una ceremonia organizada por la Academia para reinaugurar el monumento (que será trasladado) al General Cesáreo L. Berisso, el primer piloto que realizó un aterrizaje en nuestro país.

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