Tras el encuentro, Conte rechazó descartar la fusión con Globalia, aunque eso sí, sus palabras se referían solo sobre un acuerdo con alguna de las divisiones del grupo que preside Juan José Hidalgo. “Habrá que ver si esos rumores llegan a buen puerto”, dijo en declaraciones recogidas por la prensa local.

El nombramiento de Conte fue interpretado por todos como el síntoma de que Carlyle y Vista Capital pretendían acelerar la salida a bolsa del conglomerado turístico anteriormente encuadrado en el Grupo Iberostar, pero las turbulencias del mercado lo han ido desaconsejando desde entonces.

Los rumores de fusión entre Orizonia y Globalia han venido siendo una constante en los últimos meses en el sector turístico, aunque esas profecías no han tenido el más mínimo fundamento en ningún momento, ni han sido filtradas por nadie implicado en alguna de las partes.

Ahora, por primera vez públicamente, un alto dirigente de una de las partes ha rechazado descartar una alianza en ramas concretas entre los dos mayores grupos turísticos del país, y lo llamativo es que no haya sido alguien frecuentemente tan impulsivo como el carismático Juan José Hidalgo.

De hecho, el agosto pasado, cuando se conoció mediante este digital que el presidente de Globalia había puesto en venta su grupo hacía tres meses y que desde entonces no había recibido ninguna oferta, Hidalgo convocó a todos los medios para decirles que nada era verdad, y en particular enfatizó que menos aún una fusión con Orizonia.

Hidalgo, que con el tiempo admitió que sí que había puesto a Globalia en venta, fue más tajante que nunca respecto a una fusión con Orizonia, pero ahora, una persona de perfil más discreto y moderado como el expresidente de Iberia ha sido el que ha vuelto a avivar un rumor al ser concreto con aquello de que no está descartada la unión pero solo entre divisiones.

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