Al paso que vamos, si no pasa algo de esto, en muy breve lapso estaremos todos dentro de nuestras casas, por otro breve lapso y después...¡quién sabe!.

Ya está paralizándose todo, en todos lados.

Aún hay dinero en las billeteras, los monederos y en las cuentas bancarias. Pero está cesando la generación para reproducirlo...¿verdad?

Ya hay supermercados desabastecidos en varios puntos del planeta, en general, todavía hay alimentos...¿por cuánto tiempo más?

Esta medianoche cesa la operación aérea comercial entre Estados Unidos y Europa, confirmándose de este modo un macabro hito en la historia de la humanidad que no debería hacer falta que sea explicado.

Ayer, asistimos atónitos a una cadena nacional de radio y televisión del presidente argentino que dio un discurso político para reiterar ni más ni menos lo que dijo horas antes en un DNU.

En Uruguay siguen llegando aviones de aerolíneas comerciales y ferris; sigue ingresando gente por los puentes, a pie, o en aviones privados, pero...nos enteramos por la cuenta de Twitter del ministro Germán Cardoso lo siguiente: "Luego de coordinar con el Presidente de la República y el Ministro de Salud Pública, la autoridad sanitaria ha decidido no autorizar a bajar en Punta del Este al Crucero que lo tenía previsto hacer a primeras horas de la mañana de hoy».

Abundan, se superponen, hartan las fake news.

Aparecen seudo científicos, futurólogos y chantas conocidos a dar cátedra sobre lo que hicieron los chinos, que el laboratorio, que la superpoblación y que muchas otras sandeces entre las que quizás, haya alguna cosa verdadera. En momentos como el presente, todo puede ser.

Pero afortunadamente, también hay científicos valiosos y velerosos, como el virólogo y especialista en enfermedades infecciosas argentino, Pablo Goldschmidt, quien deja este mensaje en una entrevista con colegas del país vecino.

Más temprano que tarde, seguramente asistiremos a alguna de las tres opciones del título. De lo contrario...

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