por Sergio Antonio Herrera, desde Salinas, Uruguay
Se puede creer, se puede soñar y abrir las alas para escuchar al viento y comprobar que no es tan difícil aprender a volar.
Pero como este mundo no pide perdón, no hay que perder la fe ni la calma pero mucho menos el norte, entonces para conducir la actividad turística de un país como Uruguay hay que tener por lo menos la sabiduría de escuchar y la humildad de conceder, para gestionar como esperan los que también entienden del tema pero sólo se animan a expresarse en corrillos y a espaldas de quienes conducen por temor a las represalias. Represalias reales, ocurridas, narradas por quienes las sufrieron.
Se está por cumplir el primer mes del onceavo año de gobierno del FA y de la misma conducción del turismo.
Uruguay sigue haciendo presentaciones en ferias y en embajadas en el exterior de uruguayos para uruguayos. Rara vez acuden a las mismas prensa y operadores del lugar del evento. Los que siempre están son los directores de turismo departamentales, a veces algún intendente, algún edil y hasta algún parlamentario. Generalmente hay algún periodista, casi siempre compatriotas.
Jamás encaramos la promoción del eventual mejor mercado que tenemos después de Argentina que es el estado de San Pablo como debiésemos hacerlo, sin embargo hemos gastado muchísimo dinero en poner una oficina en Japón y en ir a buscar golfistas a China y turistas a Rusia.
Ahora resulta que en 2015 tuvimos más de tres millones de turistas y en esa cuenta no entra el aluvión de la "Ola Macri" del actual verano.
Preparémonos, al mejor estilo del Barómetro de la OMT, dentro de poco sabremos que andamos cerca de los 4 millones de turistas y si seguimos así, antes del 2019 vamos a superar a Argentina y a Brasil con más de 5 y más de 6 millones de turistas respectivamente, aunque el primero sea 15 veces más grande que Uruguay y el segundo, lo sea 45 veces.
Pluna iba a perder 20 millones de dólares en 2012 y la cerraron. ¿Cuánto se gastó en seguro de paro y en financiar la creación de Alas Uruguay?. (Por las dudas, para que no nos inventen alguna más, después de la herejía del cierre ordenado por Mujica, seguimos manteniendo la opinión que se hizo lo correcto con los recursos humanos y en tratar de sacar la pata del lazo con la nueva aerolínea pero, al mismo tiempo es justo señalar que si no se hubiese cerrado Pluna, habríamos ahorrado dinero y muchos sinsabores). Echaron a Campiani y sus socios, hicieron el papelón del aval de Cosmo y terminaron regalando los 7 malditos CRJ900 Bombardier (y esa historia aún no terminó, va a ser muchísimo más costosa).
Uno de los principales instigadores del cierre de Pluna era el presidente de ANCAP, hoy Vicepresidente de la República. Mientras hacía perder cientos de millones de dólares a la petrolera, como denunciamos en el libro Pluna, el riesgo de volar alto, le mintió a la IATA durante varios años acerca del precio del combustible en Uruguay al que contrariamente al resto de los países le aplicaba impuestos (IMESI), práctica con la cual le hizo perder a Pluna SA en ese período 14 millones de dólares; según acta del directorio de Pluna del 25 de junio de 2012 incumplió la resolución del Ministerio de Economía y Finanzas y no devolvió los cheques diferidos que él ni se enteró que existían durante un año. Fue también quien avaló "el fiado" del charter contratado por el Pato Celeste y pagado al tiempo por Tenfield (créase o no) a Pluna, para que volara a Venezuela una delegación de la mutual de futbolistas a jugar un partido amistoso en agosto de 2008, exactamente un año después del sonado caso de la valija de Antonini Wilson en Ezeiza. Ah! en ese avión, además de Sendic, viajaron José Mujica, Eduardo Bonomi y Enrique Pintado que por supuesto no lo hicieron para ir a ver el partido.
Resulta que el tremendo agujero de ANCAP, el más grande de la historia de Uruguay en una empresa pública es culpa del tipo de cambio!!! y de maniobras de la oposición con fines electorales!!!
Lejos de rebajar las tarifas de UTE como se había anunciado dado el ridículo precio del petróleo actual, se subieron casi un 10% al igual que las tarifas de la supercontaminada agua de OSE, y de la cada más ineficiente ANTEL. Contra ello hubo protestas de productores rurales y desde el gobierno se dice que se hacen con fines electorales.
A nosotros, desde las más altas jerarquías del partido de gobierno hace pocos días, mientras estábamos en el exterior, se nos acusó de poco profesionales y de dar golpes bajos eminentemente políticos por el simple hecho que a quien nos hizo llegar el agravio, quien aunque cueste creerlo no usa Internet y se hace imprimir lo que escribimos para leerlo, o le dieron algún papelito menos o le informaron muy mal e intencionadamente.
Desmentimos con pruebas contundentes el hecho del que se nos acusaba pero se hizo caso omiso. Somos culpables.
Mientras nuestras culpas sigan siendo como las que expresamos más arriba, seguiremos siendo culpables pero también seguiremos durmiendo tranquilos con nuestra conciencia.
Para el final, las próximas elecciones son en 2019. ¿De qué fines electorales estamos hablando?.
Portal de América