por Bárbara Gimpel
Hoy los nacidos entre 1980 (algunos dicen 1977) y el 2000, que llegaron a la vida adulta en esta época, son conocidos como la Generación MILLENNIALS. Ellos son el nuevo segmento de mercado que está rompiendo paradigmas y generando nuevas alternativas de negocios. Los modelos clásicos no funcionan con ellos. Yo prefiero llamarla “Generación Smart”, porque realmente lo son.
Son nativos digitales que han ya usado internet durante sus estudios. Los Millennials conforman 1/5 de la población del mundo desarrollado y sólo en USD ya gastan más de $ 1.3 trillones al año, siendo responsables de más del 30% de las ventas al por menor e influenciando también las de su entorno inmediato.
CONSTRUCCIÓN DE LEALTAD
No se casan con una propuesta ni compran publicidad promocional. Según una de las últimas publicaciones de Forbes el 33% de los Millennials se informan a través de blogs y de opiniones de otros usuarios antes de hacer una compra o contratar un servicio, esto nos muestra un patrón de consumo de los Millennials. Ellos confían en las redes sociales para saber realmente lo que pasa en el mundo, especialmente buscan en el contenido de compañeros en los que creen, basan sus compras en recomendaciones sustentadas en experiencias. Ese es uno de los pilares que hace exitoso el modelo de referencias y recomendaciones de las nuevas plataformas colaborativas. Una vez que adoptan una forma o una marca son leales a ella y la promueven. Son una generación de “prosumidores”.
NATIVOS DIGITALES
Son “únicos”. Son la primera generación digital que no conoce el mundo sin internet ni smartphones. Llevan la tecnología en su ADN, más del 90% de sus consultas y compras están definidas desde la palma de su mano. Su smartphone es casi una extensión de su cerebro. Una herramienta cuyo último uso seguramente sea hablar a través de él. Se conectan y comunican en las redes, con imágenes y geolocalización. Basan sus experiencias en el contacto y que este sea digital es su forma de “estar en el mundo y dominarlo”. Todas las plataformas de economía colaborativa generan inmediata simbiosis con ellos en cuanto la “comunidad virtual” las avala.
La buena noticia es que son “prosumidores” natos. Saben lo que quieren, saben pedirlo y están dispuestos a colaborar para crearlo y mejorarlo. No solo consumen, sino que promueven y cocrean junto a las empresas que están dispuestas a escucharlos. Por lo mismo generan una empatía y compromiso con ellas que va más allá del simple consumo. Se sienten parte. Eso asegura el éxito de muchas de las nuevas plataformas y negocios actuales.
Nacidos en un mundo con economía en crisis quieren sacar el máximo provecho con la mínima inversión pero sin renunciar a calidad y confort. Ellos nacieron globalizados, los límites y fronteras no existen, conciben un mundo más integrado y la tecnología los respalda. Todo eso está en la base de la economía colaborativa.
¿CRISIS DEL VIEJO MODELO? CLARO QUE SI
Estamos en un punto sin retorno, los Millennials no van a retroceder. Ellos no van a cambiar sino a cambiar las cosas. Hasta los más recalcitrantes conservadores (les guste o no) tendrán que reconocer que estamos ante el ABC de la economía: el mercado manda y ellos son el mercado. Son la generación globalmente predominante, hoy se estiman 1800 millones en el mundo, que alguien se atreva a discutir con esa cifra.
Además de eso son influyentes, el 74% de ellos piensa (y siente que es su responsabilidad) influir sobre las decisiones de compra de su entorno. Impactan en las decisiones de compra de sus pares y familiares, se les conoce como influenciadores ALFA.
Son consumidores responsables, saben cuánto vale lo que quieren y están dispuestos a pagar por ello (lo justo, no más). Saben cómo moverse, conocen las reglas de los nuevos modelos… ellos las hicieron.
La lección a aprender (y más vale hacerlo rápido) es que este mercado no se puede regular, avanza más rápido que las reglas y tiene sus propias vías. Los Millennials no se conforman, exigen y crean cambios.
Quizás resulte conveniente observar los movimientos de los grandes conglomerados y ver cómo van asimilando esta nueva realidad generando híbridos que revitalizan y reinventan sus antiguos formatos. No hay que olvidar como no hace mucho nos espantaban los modelos B&B, Líneas Aéreas Low Cost, Inmobiliarias y Agencias de Viaje online, etc. La respuesta puede estar justamente en la intersección.
La recomendación (y posiblemente el único camino) es no resistirse sino escuchar y aprender. El mercado está hablando, bidireccionalmente y online. Nunca una época fue más Darwiniana, adaptarse y evolucionar…o morir.
Portal de América