Transporte aéreo a la región inmediata: último trimestre sombrío
Martes, 23 Septiembre 2014
"Con el despido de Claudia Fuentes BQB dejó una persona en el aeropuerto y otra en el centro de Asunción" nos dijeron ayer con acento guaraní sobre la situación de la aerolínea uruguaya que dejó de operar a Brasil y a Chile y mantiene apenas dos frecuencias diarias a Buenos Aires y una a la capital paraguaya.
En el estudio de mercado presentado por Alas Uruguaya al FONDES se indica que sumando los vuelos de Aerolíneas Argentinas y BQB el tráfico en el Puente Aéreo cayó un 54%.
¿Cómo queda el panorama si luego de bajar a Fuentes en Paraguay, a Valdez en Uruguay y exiliar a Juan Patricio López, como todo parece indicar BQB se apresta a suspender o terminar sus operaciones?.
Más grave aún es el panorama en la ruta a Asunción en el que la aerolínea de López Mena tiene la exclusividad transitoria de operación.
Estamos entrando a una etapa del año que se puede decir es una de las más complicadas en materia de transporte ya que se aproxima el clima favorable y se entra de lleno en la época de las ferias y los congresos en diferentes actividades y el turismo es una de las principales en ese rubro.
Cada día que pasa aparece como más imprescindible que los gobiernos del Mercosur al menos, tomen conciencia de la trascendencia que tiene el transporte aéreo para la región y de una buena vez extremen los esfuerzos por generar el escenario más propicio para que los empresarios privados se animen, o bien a invertir en nuevos proyectos o bien a reciclar los existentes.
Conversando ayer con uno de los principales operadores turísticos uruguayos en un momento nos dijo "¡Qué lástima que Alas Uruguay aún no está pronta!, tiene el escenario ideal para empezar a operar".
Y sí, estamos totalmente de acuerdo con esa reflexión y todos quienes nos leen saben lo que pensamos al respecto pero nuestra mirada pretende ir un poco más allá y estamos convencidos que más allá que este proyecto uruguayo nazca bien pergeñado y en un momento favorable, mucho mejor sería que apareciese en un contexto en el que las condicionantes generales fueran más propicias.
Para que ello suceda es clave que Argentina cambie radicalmente su política aeronáutica, lo cual a priori, aparece como realmente improbable.
Una readecuación en el tamaño de Aerolíneas Argentinas y una apertura mayor de sus espacios aéreos harían variar tanto el negocio que aventaría los miedos hasta de administraciones en extremo proteccionistas como la K.
Por el momento, habrá que volar cuando se pueda y pagando lo que piden, no hay otra.
Portal de América