Juan Martínez, Presidente de AHRU y Vicepresidente de la citada cámara, como lo recordamos el pasado martes en Emergencia turística argumentó clara y contundentemente acerca de cuales eran los indicadores de la innegable crisis que afectaba al sector.

Fernando Massa, Presidente del Centro de Hoteles de Punta del Este fue calificado de "irresponsable" al anunciar que había, en el período más alto de la temporada, capacidad hotelera ociosa de entre un 25 y un 30%.

Comenzaron mucho antes de terminar el presente verano, los envíos al seguro de paro en los destinos turísticos y en la pasada jornada, en plena temporada, se anuncia el cierre del Casino del Mantra el próximo 28 d efebrero y la medida de UTE que aceptó financiar el consumo de energía de los hoteles hasta en un 70% para la próxima temporada baja.

La realidad es tan verdadera que inexorablemente termina "llevándose puesta" cualquier falacia política. Acaba de ocurrir una vez más.

Hemos reiterado hasta el cansancio que la culpa de la ausencia de argentinos en nuestro destino y del magro gasto que realizan los pocos que vienen es producto de las medidas del gobierno K y para nada, responsabilidad del Ministerio de Turismo y Deporte uruguayo.

Pero es innegable que este organismo no ha tenido la previsión de buscar mercados sustitutivos y lo que es peor, tampoco ha promovido la adecuación de condicionantes favorables para que ello suceda como por ejemplo, ayudar a recuperar la conectividad en vez de pretender reinstalarla a través de declaraciones en los medios.

Lo que ahora se anuncia como un logro del MINTURD, la gestión ante UTE para que financie la energía que consumirán en la baja temporada los hoteles, es ni más ni menos que la certificación oficial de la  emergencia turística.

Consultado ayer por el PDA, acerca del anuncio del cierre del Casino del Mantra, Alberto Prandi, ex subsecretario de turismo y deporte del gobierno de Tabaré Vázquez dijo: "Vamos a seguir recibiendo noticias de este tenor, en la medida que la rentabilidad en todas las áreas del Turismo y sus actividades conexas, han bajado a niveles alarmantes. A esto se suma, lo que hemos venido diciendo, la propuesta Punta del Este fue sistemáticamente degradada en los últimos 20 años. Advertimos que habían decenas de ejemplos de balnearios similares e incluso superiores al nuestro, que cuando recorrieron el camino de la construcción a ultranza, terminaron perdiendo su identidad, su encanto y por consiguiente una parte importante de sus visitantes habituales, los de alto poder adquisitivo que dejaron de venir, cuando ya no encontraron mas, el "balneario" que los cautivó, para enfrentarse a una ciudad de hormigón, masificada artificialmente en beneficio de los inversores de turno".

Generalmente padecemos el señalamiento por ser "incómodos" como alguna vez nos calificó una personalidad internacional del turismo. En situaciones como la presente, no dudamos un sólo instante en reivindicar nuestra línea.


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