"A priori, la gente va a pensar que harás un libro para defender a Campiani", palabras más, palabras menos también, nos dijeron en casa, los amigos, los conocidos en varias oportunidades.

Todas las veces respondí lo mismo. El acuerdo es hacer un libro con el relato central de Campiani no solamente de sus cinco años en Pluna, sino de mucho más y si bien nosotros lo habíamos pensado y habíamos decidido hacerlo, fue él mismo el que nos sugirió que entrevistásemos a la mayor cantidad de actores posibles involucrados con la historia, "para que cada quien saque sus propias conclusiones" nos dijo en febrero de 2013, sentado descalzo en el piso del apartamento de Melitón González con Jutta, su esposa, su amiga, su gran soporte, igual que él, también de jeans, también descalza, sentada a su lado.

Podíamos haber hecho un librito de apuro, refritando los kilómetros de escritura que hicimos acerca de Pluna desde el 2007 para acá y sumando las varias horas grabadas con Campiani en las que nos cuenta todo o usando lo que nos ha dicho su familia, sus amigos, algunos integrantes de sus equipos de trabajo, algunos referentes internacionales de la aviación.

Pero habíamos pactado no publicar y no publicamos.

Y ahora, por obvias razones, hay menos apuro.

Durante el mes de enero vamos a terminar las entrevistas que nos faltan.

Personalmente, por teléfono, por skype, por FaceTime, por correo electrónico y dedicaremos todo febrero a escribir, ordenar, corregir, armar para si Dios así lo quiere, poder presentar la obra terminada a fines del próximo mes de marzo.

Estamos invitando en estas horas a todos los protagonistas que nos faltaban para charlar.

Sabemos de antemano -porque estamos en Uruguay- que varios no van a a querer hablar, por la conservadora uruguayez del "no te metás", pero los que a nosotros nos interesaba de verdad que hablasen, ya lo han hecho o ya nos han dado su palabra para hacerlo.

Hay muchos testimonios acerca de los cuales no será necesario indicar quien o quienes lo dijeron. Hay algunas partes de la historia que quizás sea  mejor no poner los nombres de quienes lo dijeron.

Nuestro trabajo lo juzgarán los lectores. Podrá ser malo, regular, bueno o excelente, no lo sabemos, pero lo único que podemos asegurar desde ya, es que el libro que relate la verdad de los últimos cinco años de Pluna, con el más amplio encare de información, será el nuestro, razón por la cual no quisimos apurarnos a editar un librito de verano para leer en la playa promoviendo historias perversas, enredos políticos y suposiciones varias.

Portal de América