Dada la buena propaganda del nuevo servicio, como es más fácil copiar que crear, comenzaron a proliferar los carritos por todo el país y al poco tiempo, como sucede con todas las cosas, el mercado fue adecuando la oferta y si bien aún subsisten muchos, la inmensa mayoría de aquellos que habían irrumpido, desaparecieron.

Desde esta historia de los chorizos, en un mercado muy restringido por la reducida población que tiene Uruguay, cada vez que en algún rubro se suceden las aperturas masivas de bocas de expedición e inexorablemente el mercado las descarta, solemos escuchar "y...pasó lo mismo que con el Galleguito".

Desde hace muchos años existen las ferias de turismo, pero nunca como en la actualidad tantas y en tantos lugares.

Desde nuestra modesta opinión, con las ferias de turismo ya empezó a pasar lo mismo y el mercado se está encargando de descartar las que están de más, que para nosotros, son la inmensa mayoría.

Nuestro colega y amigo argentino Eduardo Alt, director de Travel Update, residente en Perú hace más de tres décadas, está llevando adelante las ferias virtuales con singular éxito.

Ayer publicamos las declaraciones del Secretario de Turismo de la Ciudad de México Licenciado Miguel Torruco Marqués: "Ir a las ferias de turismo sólo sirve para engordar"

Estamos de acuerdo con Eduardo, porque entendemos que por ahí está el camino y también los estamos con Torruco cuando además afirma que para promocionar un destino hay que ir a golpear puertas y llevar operadores y periodistas a los destinos en vivo y en directo.

Siempre decimos que nos toca el papel de ser antipáticos y a la vez, de pinchadores de globos y lo hacemos hoy una vez más.

Las ferias de turismo además de ser el negocio grande para los organizadores (¡chapeau!!), es la oportunidad que les permite hacer la diferencia a los funcionarios públicos a través de viáticos, prebendas y hasta les da la posibilidad de hacer negocios mucho más redituables que ir a mostrar folletitos o videos, como es el de engancharse en alguna operación comercial uniendo emisores y receptivos privados.

Sin dudarlo un instante, en el caso concreto de Uruguay, cambiaríamos un mes de publicidad en la cadena Globo por la presencia en la mayoría de las ferias a las que se asisten, que suponemos son las que figuran en  la página web oficial.

Los costos de los stands cada vez son mayores; en la actualidad el dinero invertido en folletería es el de peor retorno, en las oportunidades en las que hemos acudido a algunas presentaciones en el exterior, vemos el error recurrente que cada vez que se presentan videos o se hacen charlas sobre determinados destinos nacionales, la platea está compuesta por compatriotas asistentes al evento y no por operadores y prensa extranjera.

Por todo ello, una vez más decimos que la cantidad no asegura calidad.

Cada día más los dineros públicos exigen mayor eficiencia en la inversión.

Estamos abriendo demasiados carritos de chorizos.

Portal de América