La reflexión de un muchacho que sabe: "la política del ojímetro debería dejar de funcionar".
Martes, 16 Julio 2013
Algunas veces, cuando por diferentes razones no podemos citar autorías, acudimos a la figura "del muchacho que sabe", el que como ya sabrán nuestros lectores, es uno y son muchos. En este caso el improvisado corresponsal es un viejo lobo del turismo el que sinceramente, no sabemos a ciencia cierta si afirmar que se retiró o despunta el vicio desde otro costado de la actividad. Lo que si podemos afirmar es que sabe lo que dice y lo avala una vida en el turismo. Nos mandó este mensaje:
Querido Antonio:
Durante mucho tiempo todos los involucrados en turismo hemos participado de una manera u otra en la realización de la promoción de nuestro país. Hoteleros, operadores receptivos, intendencias, cámaras de distintas ramas de la actividad, con resultados muchas veces satisfactorios y muchas veces con el sentimiento que teníamos que seguir concurriendo, pero ahora veo con el tiempo y un poco alejado de la diaria con respecto a ese tipo de actividad que primero no hay que dejarla y segundo hay que orientarla y paso a desarrollar mi pensamiento. Se me viene a la mente la siguiente pregunta: "si una compañía aérea necesita un mínimo de pasajeros para que su viaje no sea operado a pérdida (ahí surgen las diferentes tarifas por las diferentes clases); si una peluquería necesita tantos cortes de cabello para justificar abrir sus puertas; si a un hotel necesita tantos alojamientos para no perder, me aparece la siguiente pregunta: ¿cuántos pasajeros necesita el Uruguay para financiar su puesta en escena para el turismo?. Entonces, ante la realidad que indica que hasta ahora nadie hizo ese estudio, que nadie ha llegado a la conclusión señalada de ¿cuántos pasajeros necesitamos?, sería menester que tome cartas en el asunto el Ministerio de Economía y Finanzas por ejemplo, para darle forma y luego, el Ministerio de Turismo y Deporte tendrá que involucrar a toda la actividad privada en ese objetivo. El resultado quizás pueda ser increíble, quizás, porque me tienen un poco cansado todas las declaraciones de un lado y del otro, unos diciendo que vinieron tantos pero no son tantos y los otros, quejándose que no les da para nada, creo que sería bueno el método de saber, cuántos pasajeros necesita Punta del Este en el año para no perder dinero, cuántos necesita Colonia, y así nombrar a todos para en conjunto poder decir cuántos pasajeros y que estadía, cuantas escalas de cruceros, cuantos congresos necesitamos. En suma, establecer las bases para que la actividad publica y la privada realicen un trabajo profesional. Quizás de ahí surja que por ahora no se necesitan más hoteles o rentadoras o agencias de receptivo, pero creo que la política del ojimetro debería dejar de funcionar.
Es acertada la reflexión y válida la sugerencia.
Pero una vez más recordamos que para hacer ésta o cualquier otra acción técnica, se necesitan recursos idóneos y Uruguay no los tiene en donde debe.
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