Los Cruyff y los Guardiola del turismo
Lunes, 17 Junio 2013
Luego de sufrir el partido ante España por la Copa Confederaciones y comprobar que los Campeones del Mundo son la regla y nosotros a veces la excepción, recordamos que siempre hemos tenido la convicción, si se quiere ambivalente, que en algunas cosas hay que aprender de España y en otras ni mirarla. Nos han leído en ocasiones quejarnos de la excesiva presencia de consultores hispanos de turismo en nuestro suelo, mayormente catalanes y hace bien poco, advertir que desde la propia FITUR se anunciaba que vendrían a vendernos su know how como una de las salidas coyunturales a la crisis que les golpea.
Muchas veces hemos dicho que estamos hartos que nos sigan queriendo emabucar con espejitos de colores, sin embargo, a fines del mes de julio de 2006, en el Portal del Uruguay (sitio de nuestra propiedad, actualmente en receso), publicamos dos artículos que habíamos escrito como capítulos del libro no editado "Turismo, la industria desconocida", el primero de ellos llevaba por título SER ESPAÑA, el porqué y el otro, SER ESPAÑA, el cómo.
La idea es bien clara, a pesar de todos los pesares, para aplicar bien la receta y obviamente, tomando buena nota de los errores, deberíamos aprender de los Meliá, los Marsans, los Baixas y tantos otros que crearon el flujo latinoamericano de turismo hacia el Viejo Continente con paso obligado por sus dominios, cuando el viaje transatlántico aún era en vapores y desde hace unos cuantos años, pagando peaje en Barajas.
Hace pocos días, con la llegada del primer vuelo de AIR EUROPA, Juan José Hidalgo decía que bien podía ser España la puerta de entrada del Uruguay y de los países de Latinoamérica a Europa y que a su vez Uruguay, podía cumplir ese lugar a la inversa para quienes lleguen del viejo continente.
A casi siete años de aquella publicación de los dos artículos, a la vez de invitarles nuevamente a repasarlos con la consideración inevitable del paso del tiempo y su correspondiente benevolencia en el análisis, queremos plantear una vez más que las estrategias valederas, los programas exitosos, nunca son casuales, siempre vienen precedidos de mucho trabajo y conocimiento.
Hoy en día Vicente Del Bosque goza conduciendo una máquina pérfecta diseñada primero por Johan Cruyff y armada por Pep Guardiola.
En el turismo uruguayo, hay Cruyffs y Guardiolas y tienen mucho camino recorrido, solamente hace falta convocarlos.
Pero lo más importante es encontrar a un Vicente del Bosque y para ello, nos gustaría destacar lo que dice hoy mismo en Opinión Damián Argul (¿Johan o Pep?) cuando entregándonos esa joyita Pobre pero sexy, nos recuerda: "De la charla de Toni Puig rescatamos finalmente el consejo que dió a los administradores de ciudades: "Quienes lleven adelante estos planes deben ser elegidos por sus conocimientos, creatividad, capacidad de innovar y realizar. No por afinidades políticas“...
Portal de América