Juan Carlos López Mena nadie lo duda, pasará a la historia como uno de los empresarios más importantes del transporte y el turismo de finales del siglo XX y comienzos del XXI en el Río de la Plata. Eso no está en discusión como tampoco su gran contracción al trabajo, su visión para algunos negocios como el fluvial rioplatense y el lácteo.

Pero hay algunas características que se le han endosado, acerca de las cuales nosotros siempre hemos estado en desacuerdo.

López Mena es quien indica hasta como deben estacionar los buses en las terminales y es quien encarga el ¿catering? para los aviones de BQB a alguien muy cercano.

Cuesta "leer" por dónde estará la continuidad el día que como merece luego de tanto esfuerzo, decida retirarse de la vida comercial activa o directamente, por cualquier otra causa no esté al frente de sus empresas.

Pero en este análisis no podemos dejar de lado el actual contexto, al que estamos asistiendo, en el que cada día que pasa se ventilan nuevas desprolijidades.

Es en este punto donde nosotros confirmamos lo que hemos venido sosteniendo en los últimos años: una cosa es la inteligencia y otra muy diferente es la impunidad que otorga la escasa cuota de escrúpulos.

Solamente alguien convencidamente impune puede idear la patraña de Cosmo.

Alguien con inteligencia no podría haber armado una movida tan burda que corriese el riesgo de poner en evidencia a sus allegados del poder, como los puso.

Ese terrible error estratégico, fue el disparador para que senadores de la propia fuerza que gobierna como Rubio y Lorier, le asestarán dos puñetazos letales en plena quijada.

Las consecuencias de ese terrible error estratégico (tener que hacerse cargo del pago de la fianza por la subasta de los 7 CRJ) ha sido el disparador para que políticos del Partido Nacional y del Partido Colorado, los mismos que hace unos meses apenas él chasqueó los dedos fueron corriendo a su oficina para salir luego a la prensa diciendo que al menos él daba la cara y explicaba, ahora, se laven las manos y tomen distancia para no "quemarse". Aquí vale el viejo dicho: "las cenizas no se queman...".

Tanto en la radio como en este sitio, en alguna ocasión nos habíamos preguntado que podría pasar el día que empezara a investigarse "para atrás" y se comenzase a remover la historia del empresario en los años anteriores a nivel burocrático estatal, departamental y municipal. Bien, al parecer el diputado del Partido Colorado Juan Manuel Garino hará una serie de pedidos de informes a distintos organismos del Estado que tengan vínculos con Juan Carlos López Mena para conocer cuáles son las exoneraciones tributarias de las que goza el empresario y cuál es su situación actual con el Banco República (BROU). En diálogo con En Perspectiva, Garino aseguró que el pago del aval de Cosmo es "un negocio más dentro de una gran gama de situaciones" que tienen como protagonistas a las empresas de López Mena que "operan con deuda del BROU". "Cuando hay un montón de exoneraciones tributarias, un montón de permisos de por medio y el BROU es acreedor de varias empresas del señor López Mena, es bien fácil el diálogo".

¿Cuánto falta para que otro legslador cualquiera empiece a interesarse por la forma en que trajo los primeros ómnibus en la década del 80 y la forma en que se le entregaron flamantes las terminales portuarias que opera y la forma en las que liquidó a la competencia y la forma utilizada para ser sancionado por la Liga de Defensa del Consumidor y por la DINACIA por publicidad engañosa y precios predatorios respectivamente y la forma en que actualmente aniquila toda competencia gracias al manejo "a piacere" del tema tarifario con Buquebus, entre otros?.

Por el bien de muchos, a pesar de todo, larga vida a López Mena.

Portal de América