Hace pocas semanas que ha dado comienzo una nueva legislatura, la X de nuestra joven democracia, y si una cosa ha quedado clara en este tiempo es la importancia que desde el nuevo Gobierno de España presidido por Mariano Rajoy se le otorga a la que siempre he denominado como primera industria del país.

Para el nuevo Gobierno de España no existen dudas de que el turismo está llamado a jugar un papel singular en la recuperación económica, y ahí deben ser protagonistas determinantes las empresas y operadores. Ellos saben mejor que nadie qué hacer y cómo. Las administraciones públicas, por su parte, deben disponer políticas eficaces, ser capaces de mejorar la competitividad del sector y priorizar acciones en un marco de austeridad, para lo cual el Gobierno ya se encuentra elaborando un Plan Integral de Turismo en colaboración con los representantes del sector y con las comunidades autónomas, un plan que reconozca al sector la importancia que tiene, que contemple al turismo como una actividad transversal en la que exista coordinación entre los distintos niveles administrativos del Estado, de las comunidades autónomas y de los entes locales.

Un Plan Integral de Turismo que he venido reclamando como portavoz de turismo del Partido Popular en el Senado desde hace años al Gobierno socialista y que, una y otra vez, fue rechazado, y que el propio Mariano Rajoy (en uno de sus primeros actos públicos como presidente del Gobierno, durante la inauguración del Foro Turístico organizado por Exceltur el pasado mes de enero) anunció, y cuyas líneas básicas serán la creación de un entorno favorable para el desarrollo de las empresas turísticas, la homogenización y simplificación de la normativa turística o la eliminación de las cargas administrativas. Un plan que apostará por la innovación, el apoyo a los emprendedores, la renovación de los destinos maduros y por impulsar, en suma, la promoción de la marca «España», marca que suma, que atrae, que prestigia y que además añade valor.

Esta apuesta del Gobierno no sólo se queda en la puesta en marcha de este Plan Integral, porque una de las primeras medidas del Gobierno fue la recuperación de la Secretaría de Estado de Turismo después de haber sido degradada por el anterior gobierno a una simple secretaría general, recuperación ésta que no solo contribuye a una mejor coordinación ministerial y con las comunidades y a la interlocución con el sector privado, sino que también traslada al exterior y pone de manifiesto, mas allá de nuestras fronteras, la importancia que desde España, empezando por su presidente, se le otorga al turismo.

Y si este es el compromiso del Gobierno de España, no es menos el que el president de la Generalitat, Alberto Fabra le otorga a este sector: su presencia en la reunión del Consejo de Turismo de la Comunitat Valenciana celebrada el miércoles en el principal municipio turístico de Europa, Benidorm, demuestra su apuesta por un sector esencial para nuestra región y que desde el Consell se seguirá potenciando y apoyando.

Siempre me gusta hablar del grandísimo potencial que tenemos, sólo hace falta voluntad e iniciativa y, por supuesto, buenos Gobiernos que quieran ponerlo en valor. Por suerte para España y para la Comunitat los tenemos y pese a las dificultades, que las hay, conseguiremos todo lo que nos propongamos.

*Portavoz de Turismo del Grupo Popular en el Senado.