Desde la Dinacia se dijo a En Perspectiva que  el martes  se abrió un plazo de 10 días para que esta adjudicación pueda ser objetada por eventuales reclamantes. Es por eso desde entonces y por tres días, el organismo publica en la prensa y en el Diario Oficial, el edicto correspondiente notificando la resolución.

De todas formas, para comenzar a volar a esos destinos Alas Uruguay deberá esperar que el organismo culmine el proceso de certificación de la empresa, que es “muy engorroso” y que incluye los tres Boeing 737/300 alquilados en EEUU para operar, lo cual puede llevar varios meses.  Los ex trabajadores de PLUNA proyectaban comenzar en octubre con los vuelos charter, y en noviembre con los regulares.

Alas Uruguay enfrenta dos desafíos principales: por un lado, negociar la obtención de los horarios más rentables y los slots disponibles en los aeropuertos, sobre todo en Buenos Aires.

Además, más de 50 de las frecuencias que tiene reservadas están siendo operadas en forma provisoria por BQB, en especial el Puente Aéreo. Consultado en rueda de prensa a fines de mayo sobre qué hará cuando llegue el momento de devolverlas, el propietario de BQB, Juan Carlos López Mena dijo: “No creo que nadie invierta 40, 50 o 60 millones de dólares en algo provisorio. Hay una ley de competividad y hay que cumplirla a rajatabla.

Portal de América - Fuente: www.espectador.com