por David Pearson

La decisión supone una victoria para Boeing en la larga batalla dialéctica que mantienen ambos fabricantes por conseguir la supremacía de un mercado con valor estimado de US$4 billones en los próximos 20 años. El duopolio cuenta con una larga trayectoria de disputas en la arena pública que se remontan a hace más de dos décadas, en las que ambos gigantes han intercambiado demandas y contra demandas sobre sus respectivos aparatos.


La última riña se deriva de unos anuncios de Boeing aparecidos en varias publicaciones de la industria aeronáutica a finales del año pasado en los que la compañía afirmaba que el último modelo de su 747 era mucho más barato en términos de costos por trayecto que el Airbus A380.

En esos anuncios, la compañía con sede en Chicago afirmaba que el 747-8 era un 26% más barato que el A380 en base a los costos de un trayecto de 6.000 millas náuticas. Aseguraba además que el 747-8 era un 8% más eficiente respecto a consumo de combustible porque el A380 era un avión más grande y más pesado.

Airbus, filial de European Aeronautic Defence & Space Co., EADSY +0.83% respondió con una campaña que mostraba al aparato de Boeing con una alargada nariz y la frase "¿Por qué está nuestro competidor estirando la verdad?", en una clara referencia al personaje de Pinocho, cuya nariz crecía cada vez que mentía.

En su fallo, el regulador británico desestima las reclamaciones de Airbus diciendo que la campaña publicitaria de Boeing que comparaba el 747-8 y el A380 "no era probable que fuera engañosa" porque los ejecutivos de la industria que la leyeran seguramente no tomarían la decisión de comprar sin antes hacer una investigación exhaustiva de ambos aparatos basada en sus propios requisitos específicos. El organismo reconoce que el anuncio de Boeing resume "sólo pocas unas características, que deberían ser interpretadas en el contexto de un amplio abanico de documentación técnica y de soporte que se entrega a los compradores de las aerolíneas".

En un comunicado, Boeing se mostró "satisfecha" de que los "anuncios que resaltan las ventajas de adquirir productos Boeing se han respaldado". El portavoz de Boeing, Charlie Miller, reconoció que las comparaciones en publicidad pueden ser una herramienta útil. "Ocasionalmente es una buena idea el publicar datos comparativos que subrayen el valor de nuestros productos", dijo.

John Leahy, ejecutivo de Airbus, aseguró en un comunicado que Boeing "sigue engañando al público al anunciar una 'distribución estándar' que realmente nunca ha sido vendida o instalada en ninguno de sus aviones. Boeing debería dejar de intentar engañar y reconocer que las viejas distribuciones de 'referencia' del 747 han sido superadas por la realidad".

Airbus explicó que una comparación justa entre los dos aviones en base al carburante consumido por asiento "debe tener en cuenta la configuración de la cabina y los niveles de comodidad reales y actuales con que operan las aerolíneas. Bajo estas condiciones comparativas, el A380 demuestra [en más de 150 vuelos diarios] un consumo notablemente inferior por asiento respecto al 747-8". Añade que el argumento de Boeing no tiene en cuenta ni la mayor capacidad de pasajeros ni la mayor comodidad para éstos del A380 con sus 525 plazas en una distribución estándar de la cabina, que se comparan con los 467 del aparato de Boeing.

Matt Wilson, portavoz de la Autoridad de Estándares en Publicidad de Reino Unido, dijo que Boeing ha presentado una queja ante el organismo en relación con los anuncios de Pinocho de Airbus. "Estamos investigando de forma oficial la reclamación de Boeing de que los anuncios y las demandas hechas por Airbus son engañosas y denigrantes", señaló.

Portal de América - Fuente: online.wsj.com